¿Puedo ser más cliché? No me gusta usar tacones, no voy a fiestas, no me gusta peinarme, me encanta leer, me gusta escribir todo lo que pase por mi cabeza, por si faltaba algo más no me había enamorado antes ... ¿Ya cumplí todos los requisitos? Bueno, también tengo un pequeño problema, soy una persona algo depresiva... no puedo afirmarlo porque un médico no me lo ha diagnosticado aún, pero sé que no es normal sentirme así.
Comprendo que la vida se compone de buenos y malos momentos, pero esos malos momentos a veces me superan y duelen. Cuando aún estaba en secundaria pensaba que el sentirme agitada por alguna situación desagradable era normal, hasta que empecé a sentirme asfixiada y en el peor de los casos como si estuviera hundiéndome en lo más profundo del océano.
Las noches siempre serán tus peores compañeras si los malos pensamientos rondan por tu cabeza, te carcomerán de a poco tu sentido común y cuando menos te das cuenta estás abrazando tu almohada, llorando y sintiendo ese nudo en la garganta que no te deja pronunciar palabra alguna. Esa sensación de encontrarte hundido siempre te perseguirá, hasta que hagas algo para cambiarlo.

YOU ARE READING
Bajo el agua
Short StoryEstando en pleno siglo xxi aún existe el tabú de admitir que la salud mental es tan importante, si tratas de ir con un especialista te tildarán de loca (claro que debo incluir a mis padres). Debo admitir que enamorarme no estaba en mis planes y meno...