Danielle

¿Crees en los ángeles?

¿Crees en los ángeles? ¿No? pues deberías ¿Por qué? porque realmente existen. Posiblemente no me creas, pero es verdad, no tengo por qué mentirte y en esta ocasión te contare la historia de uno.

Antes debes saber algo; no todos los ángeles se dedican a cuidar a la humanidad, hay algunos que, aunque no quisieran, se dedican a terminar con la vida humana y de cualquier ser vivo. Sin embargo todos pueden pasear entre los humanos sin que estos, ustedes, se den cuenta. Si cuidará o acabará con la vida, dependerá de su dolor en vida, del dolor que este tenga guardado en el corazón.

Ahora podemos continuar con la historia, contada desde el inicio de todo.

Hace mucho tiempo hubo una niña, si, una niña, la más tierna niña que puedas imaginarte, llena de bondad y pureza, además jamás supo lo que era el sufrimiento, de eso me encargue yo. La niña más hermosa que podrías imaginar, la niña más perfecta.

Esta niña amaba jugar, reír, bailar, pero especialmente le encantaba jugar en la lluvia y pasar tiempo fuera de su casa.

Ese día era solo era ella dando vueltas en la calle bajo la lluvia, girando, riendo, con esa sonrisa perfecta que tenía, disfrutando de la lluvia que caía sobre su rostro, el bello rostro que tenía. Estaba distraída, entretenida, no vio lo que podía venir, realmente no lo vio, no vio lo que venía hacia ella, la pequeña no lo vio, la pequeña estaba sola.

Ese carro le cambio la vida, si puede llamarse vida. Seguía viva pero ya no era normal, un par de alas salían de ella con solo pensarlo, todo su aspecto empezó a cambiar, era diferente a los demás niños, ahora era aún más perfecta.

Al notar los cambios la escondieron, la aislaron, pero no completamente.

Nadie podía saber, nadie supo hasta que la segunda parte de esta historia llego, por momentos maldigo la hora en la que él llego.

Él, alguien totalmente común, solo se enamoró de ella, era normal, ella era hermosa, perfecta; pero nunca imaginaria lo que ella era.

Él era humano, era, fue en el pasado.

Todo iba bien, él no sabía nada, pronto pasaría, una persona más que ella conocería, pero él se dedicó a enamorarla y lo logro.

Entonces un día, un trágico día, él también se distrajo a mitad de una calle, pero ella no dejo que nada la pasara. Así es como él se enteró, un ángel le había salvado la vida.

Ella no podía sentir dolor, me encargue de eso toda su vida y tenía que asegurarme de que él no la lastimara, tenía que seguir sin ningún dolor, sin conocer el sufrimiento.

Ahora él tenía dos opciones, o se quedaba con ella toda su vida o la dejaba antes de que ella pudiera sufrir más. Él decidió quedarse toda su vida con ella, pero entonces ahora él tenía que ser igual que ella, se puede, se pudo hacer, pero algo salió mal. Lamentablemente él si había sufrido demasiado, él era lo contrario a esta ángel, todo lo contrario, él no era perfecto. Y entonces los problemas crecieron.

Le dije que la mantuviera pura, que entre ellos no podía pasar nada porque él no era igual que ella, ¡Se lo dije y me ignoro!, el deseo que solo lo llenaba a él hicieron que aquella ángel perfecta no lo fuera más. Entonces algo más se generó; Danielle.

Yo solo tenía dos opciones, o la mataba, o la cuidaba, pero aún tengo alma.

Cuide a la madre de Danielle durante todo su embarazo. Ese bebé no podía terminar en malas manos. Aunque se escuche trillado, común, era realidad.

No era común que naciera un bebé de dos ángeles diferentes, a los ángeles normalmente no se les ocurre tener hijos.

Por esta razón solo tenía estas dos opciones, no sabíamos que podía pasar al nacer este pequeño o pequeña. La opción más fácil era matarlo al nacer, no tendría que batallar con nada, podría terminar el trabajo rápido y regresar a lo que hacía normalmente, era el camino más rápido para seguir mi vida.

Lamentablemente aún tengo algo de corazón. Cuando nació el bebé no pude matarlo. Era una bebita demasiado linda, hermosa, perfecta, al verla simplemente la ame como si fuera mía. No pude matarla, me gano el corazón.

Al nacer no pensé que Danielle tuviera algo diferente, pero con el tiempo nos dimos cuenta de que si era diferente, no era humana. Tuvimos que alejarla de los humanos, aislarla y esta vez completamente, así lo decidió su madre, realmente ella cambio cuando Danielle nació.