- Al fin... - Musitó HyeMin al divisar la casa de la pelinegra. La pelirrosa siguió caminando hasta llegar a la puerta de esta. Luego que estuvo allí gritó con todas sus fuerzas. - ¡YoonJi!
- ¿Porqué siempre que vienes gritas mi nombre?, hay un timbre, Lo sabes ¿verdad? - Dijo YoonJi con el ceño fruncido. Cualquiera que la viera pensaría que estaba enojada, pero HyeMin sabía que esa era la expresión habitual de la pelinegra.
- Lo sé pero me gusta gritar su nombre, unnie. - YoonJi puso una cara pervertida haciendo que HyeMin se diera cuenta de su error y sus mejillas se pusieran rojas como dos hermosos tomates. - ¡Pe-pero no de esa forma, me refería a que me gusta su nombre porque es muy bonito!
- Lo sé, solo bromeaba. - Dijo YoonJi sonriendo levemente. - ¿Quieres entrar?
- ¡Por supuesto! ¡¿acaso pensaba dejarme afuera con el perro, unnie?! - Dijo HyeMin haciendo un puchero.
- Tal vez... - Dijo YoonJi recibiendo un pequeño golpe en el hombro.
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- ¡Unnie, ponga música de 2NE1! - Tanto HyeMin como YoonJi estaban en en el cuarto de esta. YoonJi estaba recostada en la punta de su cama con su mp3 en la mano, mientras que HyeMin estaba sentada de la cama, lo suficientemente cerca como para poder compartir unos auriculares.
- Las pondré luego... Ahora quiero mostrarte una canción. - Dijo YoonJi y comenzó a sonar Dreaming - Chymes. Al comienzo, HyeMin pensó que esa solo era una canción que le parecía linda a YoonJi, pero el brillo en sus ojos la delataban. Cada una de las letras de esa canción... Hasta la más mínima, iba para ella.
Se hace difícil respirar, sé que me
estás sintiendo ahora, eres todo lo que veo... Casi como si estuviéramos soñando.
YoonJi se acercó lentamente al rostro de la pelirrosa y se quedó quieta, apreciando hasta el más mínimo detalle de su rostro. Todo ella era perfecta, desde sus abultados y apetecibles labios, hasta sus hermosos ojos que se volvían dos pequelas lineas cuando sonreía. Ese sin duda era el mejor beso de ambas, o al menos iba a serlo si la YoonJi no se hubiera alejado. Por miedo, quizá. O simplemente no se consideraba digna de estar de tal forma con esa hermosa chica.
- ¿Uh? - Dijo HyeMin algo aturdida. No terminaba de asimilar las cosas, ni el (a su parecer) inminente rechazo de la pelinegra.
- Acompañame a pasear a Holly, por favor. - Masculló YoonJi.
- Está bien. - Respondió HyeMin ignorando el nudo que tenía en su garganta, acompañado por un fuerte dolor en el pecho.
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YoonJi y HyeMin iban hablando animadamente (o al menos HyeMin lo hacía) Cuando la voz de cierto castaño se hizo presente.
- ¡HyeMin! - Gritó HoSeok sonriente.
- No puede ser... - Susurró HyeMin algo irritada. Odiaba que HoSeok siempre apareciera en los peores de los momentos.
- Hola de nuevo HyeMin. La tarde está perfecta para tomarse un café ¿verdad? - Dijo HoSeok manteniendo una enorme sonrisa en su rostro. - ¿Quieres acompañarme?
- Yo... no, lo siento HoSeok. - HyeMin decidió que lo mejor era no darle falsas esperanzas, aunque le doliera hacer que HoSeok se pusiera triste por su culpa. HoSeok se iba acercar más a ella pero fue alejado por YoonJi.
- Alto ahí, solecito. - YoonJi mantenía el ceño fruncido y eso la hacía lucir jodidamente tierna ante los ojos de HyeMin. Aunque por otro lado, HoSeok estaba a punto de hacerse en los pantalones.
- ¿Qué? - HoSeok estaba realmente confundido, y asustado al mismo tiempo. ¿Quién era esa chica? Repetidas veces habían visto a HyeMin muy cariñosa con una chica, y hasta había rumores de que era lesbiana, pero sólo eran eso, rumores. Aunque HoSeok estaba empezando a dudar de ello.
- Cómo escuchaste. Aléjate. - Dijo YoonJi, quien no tenía mucha paciencia para cosas como esas.
- Pero yo solo quiero que HyeMin me acompañe a tomar una taza de café. - Respondió HoSeok. El castaño si que era insistente.
- Y yo solo quiero que te vayas a la mierda. Ella ya te dijo que no, por favor no insistas... das pena.
- Pero... - Dijo HoSeok mirando los ojos de HyeMin intentando obtener una señal. La que sea.
- Vete. - Murmuró HyeMin lo más cortante que pudo, y casi pudo escuchar el corazón de HoSeok rompiéndose.
- Entonces adiós. - HoSeok sonrió débilmente y se marchó. Se sentía como si corazón le hubiera sido arrancado, lanzado al suelo, y pisoteado 1000 y una veces.
- Idiota. - Dijo YoonJi mirando a HyeMin tan intensamente que pareciera que era una cobra deseando comerse a un indefenso, y lindo hámster. Pero luego sonrió levemente. YoonJi era impredecible.
« Pero amo cuando tú intentas salvarme. »
(......)
Esta es la canción que YoonJi reprodujo.
~ Softae
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1950「 YoonMin 」
Fanfiction«Me gusta cuando actuamos como en 1950...» ~ Historia totalmente de mi autoría. ~ No se permiten copias o adaptaciones.
