-¡Evelyn! la mesa cinco- dijo Miranda en tono autoritario.
-Enseguida voy...- contestó una joven pelirroja, peinada con una coleta alta dejando caer dos largos mechones por ambos lados de su rostro. Piel blanca y grandes ojos marrones. Ella salió de una pequeña habitación, y que aduras penas se ponía un mandil rosa alrededor de su cintura.
Evelyn tomó una charola con cuatro panes dulces y dos cafés, para después llevarlos hacia la mesa cinco.
-Aquí tienen- dijo la pelirroja con una amplia sonrisa cansada.
-Gracias- respondieron los dos clientes.
Al terminar, Evelyn se dio la vuelta soltando un gran suspiro de cansancio mientras se dirigía hacia la caja registradora.
-Llegaste tarde- dijo su compañera, una pelinegra, con piel blanca como nieve y ojos azules. Un flequillo cubría por completo la frente llegando casi por debajo de las cejas. Vestía el típico uniforme de la cafetería. Blusa blanca con el logo y falda color caqui.
-Ah, sí- sonrió Evelyn enderezando la espalda quedando a la altura de su compañera. –Me quedé hasta tarde leyendo un libro, Rosalinda-
Evelyn tomó de los hombros a Rosalinda y acomodó la blusa blanca de su uniforme –Andando- sonrió
-¡Sí!- contestó Rosalinda pasando por los hombros de Evelyn para después ir hacia la caja registradora y tomar su puesto.
La amplia y moderna cafetería sostenía un ambiente confortable, ubicado en una transitada avenida y muy conocida en la ciudad, gracias a los deliciosos cafés, postres y snaks.
-Bienvenido a Tea Room, le tomo su orden- dijo Rosalinda con una amplia sonrisa.
La mañana pasó muy lenta, debido a que era lunes y era el día el cual se llenaba más por ser inició de semana.
-¡Evy!- gritó un joven desde la entrada de la cafetería.
Ella servía algunos bocadillos en una mesa, y al escuchar el grito, cerró los ojos y dijo dentro de sí misma –"Nico"- Se dio la vuelta y logró ver a un joven de cabello castaño claro y grandes ojos verdes. Que felizmente se dirigía hacia ella.
-¿Qué haces aquí?- preguntó Evelyn volteando a ver por todos lados asegurándose que la gerente no la vea, para después darse la vuelta y caminar.
-No sé porque te asustas, sí es la hora en la cual tu jefa Miranda se la pasa en la oficina- bufó Nico por detrás de Evelyn, siguiéndola.
-Es la hora del almuerzo y vienen muchos clientes a esta hora- dijo ella mientras tomaba una charola con unos sándwiches y dos jugos de naranja.
-Vienen más en la mañana, deja de quejarte, aparte deberías de sentirte afortunada, viene a visitarte- guiñó un ojo
-Vienes casi todos los días- Sin mirarlo entregó lo de la charola a los de clientes.
Al terminar, se dio la vuelta quedando cara a cara con él -¿Quieres lo de siempre?- preguntó Evelyn mientras alzaba una ceja.
-Me conoces tan bien, Evy- respondió con una amplia sonrisa
Ella reviró sus ojos y caminó hacia el mostrador, él continuaba siguiéndola.
-¿Cuándo volvemos hacer una fiesta?- preguntó Nico orgulloso.
Evelyn rio.
-Yo pongo la casa- dijo él entusiasmado.
-La última fiesta que hiciste en tu casa terminaste muy ebrio- continuó riendo incrédulamente.

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COFFEE GIRL
Teen FictionEvelyn Bonet, una empleada de 19 años en la cafetería Tea Room, lleva una vida rutinaria y tranquila, como una soltera joven y hermosa. Pero, la rutina diaria se acaba cuando Santiago Rosell, su primer amor, el cual ella lo daba por muerto, empieza...