Always a promise.

6C/ Días de Marzo. P2

Devolvamos el tiempo, el viernes ocho de marzo día de la Mujer, en mi colegio los hombres dieron hermoso detalles para la mujeres, junto comida algo que amo también, cada chico le podía regalar algo a la chica que quería y me acuerdo que aquel chico el cual su nombre es Juan Andres siempre llamado por su apellido Hernandez, ese día me dio a regalar en una cartulina un pequeño mensaje y una hermosa manilla la cuál es mi favorita; en muchas ocasiones se me había perdido y siempre la encontraba, fue un tan preciado detalle el cuál valoro mucho, pero yo... Yo simplemente esperaba el mensaje de el chico, diciéndome que me quería y felicitándome, pero simplemente fue el esperar, porque nunca llego ese mensaje hasta la noche del viernes...

Aquel viernes sucedieron muchas cosas, llore por él, porque me dolía su ignorancia hacía mi, me preguntaba una y otra vez; ¿Que había hecho YO?, Mi hermana opto por llamarlo, yo le dije que no lo hiciese pero ella ignoro mis suplicas, él se acerco y obviamente nos saludo a las dos, yo simplemente no sabia que hacer, mi hermana le pregunto; ¿Qué pasaba? ¿Por qué su cambio tan drástico? Y millonadas de preguntas sobre el tema a lo que él callo, no dijo nada. Yo me encontraba en silencio sin decir nada,sentados todos en el suelo, él miraba a un lado, mi hermana me miraba a mi y yo miraba mis pies, tenia unas inmensas ganas de llorar.

Mi hermana agarro de mi brazo y nos fuimos de ahí, él se quedo sentado, nosotras nos hicimos en donde se encontraba nuestro árbol, el chico después de unos minutos se paro de aquel lugar y se hizo con su amigos, yo jalaba de mi cabello sin saber que hacer aún, casi que llore. Mi hermana se había comprado un dulce, el cuál lo tiro y aplasto  mientras lo insultaba, yo escuchaba risas de parte de el chico y sus amigos, y pensé;  ¡Todo esto es estúpido!

Después de haber ya entrado, me encerré en mi habitación y desconsoladamente rompí en llanto, me sentía muy dolida, aunque no había tenido que tocarme para lastimarme, simplemente su inmadurez e ignorancia hacia mi me hirieron, y entendí que no simplemente que te golpen o te insulten lastima, también lo hacen las pequeñas acciones...