Los juegos que jugamos-Rwby

Capítulo 80: Enfoque

Las primeras siete balas me alcanzaron casi simultáneamente, cada una volando hacia mí en un ángulo diferente. Conmigo tan cerca, Tenne no intentó que ninguno de ellos me pasara, sino que trató de golpearme con todos ellos al mismo tiempo, coordinando las diferentes tomas para limitar mi capacidad de esquivar. Aun así, sabía que él todavía no estaba tratando de matarme y enfrentó las balas sin temor por mí mismo.

Pero solo porque él no me mataría no significaba que alguien más estuviera a salvo, así que tuve que tomar esto en serio. Además de Ren y Nora, todavía había mucha gente en esta ciudad, gente que Tenne bien podría haber estado infectando sistemáticamente de la misma manera que me había afectado a mí. Quizás aún más preocupante, existía la posibilidad alarmante de que él pudiera entregar esas habilidades a mi madre por qué ella luchó contra mi padre, robándole la vida en un instante o algo peor.

Suponiendo, por supuesto, que no lo hubiera hecho ya.

Sin embargo, no permití que tales pensamientos me frenaran; incluso con mi nueva velocidad, sabía que no debía subestimar a alguien como Tenne. Rastrear el camino de cada disparo con mis ojos confirmó que los había emparejado conmigo incluso cuando me acerqué y con sus once ojos en mí, estaba seguro de que se moverían en contra de cualquier cosa que hiciera. Los disparos fueron más lentos, lo que lo puso en desventaja, pero, por otro lado, no podía permitir que ninguno de los disparos pasara por mí por temor a las repercusiones y probablemente él lo sabía. Si hubiera sido capaz de esquivar libremente, evitar los disparos hubiera sido relativamente simple en este rango, pero en vez de eso tenía que enfrentarlos de frente.

El lado positivo de todo esto era que sabía que mi oponente era un Cazador experto. Una de las ventajas, más bien dudosas, de la lucha contra las personas de ese nivel es que casi se puede borrar la posibilidad de un error humano. Es decir, entre el entrenamiento y su apariencia, realmente no necesitaba considerar la posibilidad de que Tenne se perdiera solo, porque el tipo tenía una precisión inhumana incluso antes de que Conquest lo alcanzara y no iba a fallar a menos que hiciera algo. para hacerle perder. Incluso a velocidades como esta, me sentía bastante seguro de eso, al menos; Atrapé su primer disparo gracias a mi nueva Empatía, una habilidad que no tenía forma de saber que poseía, y luego atrapé los siguientes tres gracias a una combinación de distracción, siguiendo un curso que me llevó a interceptar. Las balas, y luego cambiando mi velocidad a mitad de movimiento.

Todo lo cual significaba que, aunque afortunadamente no era perfecto ni que lo sabía todo, tenía mucha habilidad, y eso significaba que si apuntaba a algo, sabía exactamente dónde iba a golpear. A juzgar por sus instrucciones, un par de balas iban a volar hacia mis rodillas y otra hacia mis muñecas, mientras que las tres restantes apuntaban directamente hacia mi centro de masa, apuntando a los órganos dentro de mí. Afortunadamente, eso no significó mucho para mí, dado el Cuerpo del Jugador, aunque imaginé que cada uno de ellos probablemente se calificaría como un golpe crítico si se conectaran, y él estaba guardando el resto de sus balas en reserva, esperando para adaptar el otro Disparos a mi reacción. Ellos seguían volando hacia mí, por supuesto, pero estaban lo suficientemente atrás como para que pudiera hacer que se balancearan y tejieran para hacer lo que yo hacía, como él. Ser libre de hacer con las otras balas que parecían colgar suspendidas en el aire a la velocidad a la que nos movíamos. Estaba pensando en el futuro, planeando.

Yo tambien.

Toqué el suelo y me lancé un paso hacia adelante, hacia una aparente abertura en la formación de la bala. Un momento antes de que incluso avanzara, las balas se curvaron en el aire, elevándose para coincidir con el movimiento rápidamente, de hecho, demasiado rápido, ya que disminuí una fracción ajustando mi Aceleración y luego lo aceleré un instante más tarde. El Tigre flotaba a mi alrededor antes de inclinar la parte superior de su cuerpo hacia adelante cuando estaba paralelo al suelo, ambas manos alcanzando las balas que habían apuntado a mis rodillas. Debido a mi ligera desaceleración, las balas destinadas a mis muñecas casi cayeron en mis manos y el Tigre continuó su movimiento, sacando su forma espectral de la mía mientras continuaba su giro hacia adelante y luego se arrastró sobre mi cuerpo para colocarme sobre mi espalda. Su cola se movió en medio del movimiento,