Narra Valentina
Bueno me llamo Valentina Escobar, un apellido que respetar, soy hija del adinerado Ricardo Escobar, casado con Gabriela Escobar, mi madre. Mi padre es dueño de las grandes viñas "Escobar", creadas por mi abuelo Rene Escobar, el falleció hace 5 años y heredo toda su fortuna, incluida la viña a su "único" hijo, mi padre. Mi abuela Rosa Casa Blanca, hija también del adinerado Humberto Casa Blanca, El dueño de los condominios "Casa Blanca", obligo a mi abuela a seducir a mi abuelo para casarse con el. Así lo hizo, no con mucha felicidad.
Se casaron, y tuvieron 2 lindos hijos, Vicente y Ricardo (mi padre), en ese entonces, mi tío Vicente tenía 5 tiernos años cuando Ricardo nació para arruinarle su felicidad. Cuando el era el favorito, el que tenía todos los regalos en navidad, toda la atención en las comidas familiares, el no era tonto, sabia que iba a tener una herencia, y que se la iba a quitar ese hermano, llegó Ricardo y cambio de papel. Aunque era pequeño, decidió venganza. Cuando Vicente tenía 13 años y Ricardo 8, Vicente trato de hacerle una "Broma", iba a llevarlo al rió. Fueron en sus bicicletas. En ese tiempo la familia vivía en la zona centro, en una pequeña ciudad llamada "Rengo". Los dos hermanos iban rápido en sus bicicletas a llegar al actual puente "Mendoza". Vicente le dijo a Ricardo que lo esperara en la orilla del rió porque el se iba a cambiar su ropa. Mi padre se dispuso a esperarlo, pero no sabia el maléfico plan que le tenía esperado su hermano. Lo iba a empujar, hacía el rió, pero algo no salio bien. Nunca se supo como, pero al final Vicente termino en las corrientes del rió. Fueron 5 días de búsqueda sin resultados, las monjas del convento, uno que esta casi al lado del rió, se pusieron a rezar los 5 días, por la búsqueda del pequeño Vicente. Mi abuela, lloraba desconsoladamente, su hijito, tragado por las fuertes corrientes del rió, no lo podía creer .
En el pequeño lugar al lado del rió, durante esos 5 días se armaron campañas, donde las monjas trajeron un cristo crucificado, para rezar por el alma del pequeño. Mi padre, ese pequeño con solo 8 años de edad, solo lloraba, la policía le preguntaba como había pasado todo, pero el no era capaz de responder, lo único que podía hacer era negar y asentir. Solo durante esos 5 días. Mi abuelo, solo era capaz de abrazar a mi padre y llorar, por primera vez, el fuerte millonario Rene Escobar, estaba llorando.
El quinto día había llegado, y el pequeño cuerpo de Vicente, un poco descompuesto, había sido encontrado. Su funeral fue un extraño y lluvioso día de enero. Todo el pequeño pueblo de Rengo, había ido a despedir al pequeño Escobar. La cruz que habían dejado las monjas en el lugar, se dejó donde estaba como recuerdo del pequeño Escobar. Con los años aún existe y se mantiene. Mi familia va ahí reunida todos los 16 de enero a recordad ese día.
¿Como se esto? Pues mi abuela Rosa me a contado todo, ella con su Alzheimer no puede más que conversar conmigo, y es extraño. Cada vez que me dispongo a hablar con ella, hablamos de ese día. El último día que hablamos fue hace 1 semana, y pareciera que ahí terminaba la historia pero no era así. Hoy en la tarde ella me llamó, yo fui a verla pensando que quería más té o que le cambiará la T.V, pero me dijo que quería hablar conmigo. Fui y me senté con ella en un sofá, y empezó así, claramente sus palabras:
-Cuando terminaron de enterrar a Vicente, lo único que pude hacer fue llorar desconsoladamente, me acosté en una pieza de invitados, y pensé todo lo que paso desde que ese maldito niño llegó -Esas palabras me impactaron, mi abuela no hablaría así de mi padre, solo dejé que ella terminará, la verdad cuando hablamos, solo ella habla, es como si fuera su diario de vida- Las cosas no serían así.. no serían así de ser que tu abuelo se metiera con otra sucia basura- Cada vez la historia iba teniendo cosas nuevas, cosas que jamás me imagine.-
-Pero abu-abuela, ¿como que sucia basura?- Ella me interrumpió sobresaltada.-
-SUCIA BASURA.- Grito, hice un gesto como para que me explicara y empezó.- Hubo un tiempo que con tu abuelo no nos llevábamos bien, como ya te conté, nunca yo me enamoré de tu abuelo. Un día el llegó con un niño, una cosa tan linda, igual a tu abuelo. No podía reaccionar, cuando el me contó, arroje al niño.- Me sobresalte, nunca pensaría que mi abuela hiciera eso.- Pero con su llantó de dolor, me rompió el alma. nunca pensé que iba a adoptar y criar al hijo de otra pero así lo hice. Lamentablemente el niño era mucho más lindo y carismático que mi hijo verdadero Vicente, eso le quito la “Fama” que él tenía, y el planeo venganza. Yo una idiota guiada por su hijo, lo ayude. Sabía todo lo que iba a pasar. Pero no fue así como paso todo. Después del entierro de mi hijo, Ricardo me habló, y me contó cosas muy extrañas que le paso después de que se cayera su hermano. Lo único que recuerdo bien es que me dijo, que le pellizcaron una pierna. Según ahí decían cuando le pellizcaban la pierna a un niño, era que le perseguía el diablo.- No sabía que decir, ¿a mi padre, persiguiéndolo el diablo? Tenía miedo.- Tranquila hija, sabes que, yo trate de llevarme bien con tu padre, pero después de esa última vez que hablamos, no era él mismo, era frió, incluso cuando antes siempre tenía sus manos tibias y desde ahora que no las tiene así.
-Es verdad.- Tome la bandeja de plástico que había en la mesita de noche de mi abuela.- Abuela, iré a dejar esto a la cocina.- Lo ocupe de excusa para salir, me estaba ahogando con tanta información, con tanto miedo. Salí y pensé, tengo que averiguarlo todo…
-Me dispuse a salir en mi bicicleta, no quería que nadie supiera que iba a salir. Fui directo hacia el puente Mendoza. Llegué, y el aire se puso tenso. Fui y baje por las escaleras que ahí para llegar al lugar. Vi la cruz, junto a ella muchas velas, y placas que decían “Gracias por ayudar”. Sentí un escalofrío por mis entrañas cuando vi la orilla del rio. Recordé todo lo que me contó mi abuela. De repente siento que un auto se para a la orilla del puente, era mi padre. Me miro alterado y dijo:
-¿Qué haces aquí? Nos tenías preocupados en la casa. Ven vámonos de aquí.
-Papá, tienes que decirme muchas cosas…- Me interrumpió con un “No te tengo que decir nada a ti”.- Pues ya estamos aquí.
- Pues, hija. La familia esta… está… Tiene un grave problema, no es algo simple como que si solo se hubiera muerto mi hermano, es algo peor.
-Yo se otras cosas que tú no sabes, pero no puedo descifrar el rompecabezas si no tengo todas las piezas.- Me miro extrañado y siguió hablando.-
-Mira cuando tu tío Vicente murió, a mí se me presento… El diablo. El me apretó la garganta a más no poder, pensé que me iba a morir, pero me soltó, solo que después no pude hablar. Cuando pude zafarme de todo lo que estaba haciendo, salí corriendo, pero antes de poder subir esas escaleras me pellizco la pierna.- Como pudo subió su pantalón y me mostró la marca que tenía, era un triángulo.- Sabes.- Se puso a llorar.- Tu tenías una hermana, tu madre y yo tuvimos a Francisca antes que tu.- Una lágrima recorrió mi mejilla.- Yo… yo engañe a tu madre, sin yo querer. Naciste tú. Constanza tu madre biológica, murió en el parto. Yo te cuide, tu madre… tu madre estaba destrozada.- Por esa razón mi madre no me trata como trata una madre a su hija.- Francisca tenía 3 años cuando tú llegaste, ella desapareció a los 4, por causa desconocida. Nunca la volvimos a encontrar. Y esa es la maldición hija, lo que nos tiene destinado a nosotros los Escobar, una gran vida llena de lujos, pero una gran pena por dentro.- Nos abrazamos muy fuerte, llore como nunca, y vi a mi padre llorar, por primera vez. Se hacía tarde y con mi padre decidimos irnos, cuando salíamos, sentí que me pellizcaron… Y así se repite la historia…
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Estó es para un trabajo que tengo que hacer para mi colegio D: Se los pongo para que me ayuden cualquier cosa/error/Consejo será recibido, Gracias ^^
