Los internos del Hospital Adelaide enfrentan los casos que otros Hospitales catalogarían como Absurdos acá son casos Normales.Enfrentaran grandes retos y no pueden faltar los lios amorosos.
Ya en el área de resonancia procedí a echarle talco, protector solar en toda la cara y papeles de aluminio en ciertas áreas a Eva, pusimos la bandeja de aluminio que revelaba la imagen a un papel de estraza. La maquinaria funcionaba con los desperdicios del hospital comenzamos a tirarle todo, no había un buen aroma, pero se obtuvo la energía necesaria y comenzaron a salir los destellos de luz de las imágenes de su resonancia.
Luego de que la Dra. Ramírez las analizara se descubrió una inflamación que estaba impidiendo el buen flujo de sangre, pero parecía algo infligido. Al regresar Cristóbal le pregunto si le habían hecho algún daño y se quedo callada unos segundos hasta que confeso que fue ella misma que se daba cantazos en la cabeza para poder aprender oros idiomas en el área Broca del cerebro, según ella funcionaba.
Según yo había aprendido en la escuela de medicina con ciertos estímulos se haría más fácil adquirir idiomas, pero no a cierto punto y así se los explique, pero ya su caso estaba un poco avanzado y sin control hablaba otros idiomas por lo que la Dra. Ramírez recomendó que le diéramos cantazos en la cabeza con un equipo especial para que pudiera adquirir esos lenguajes y luego bregáramos con la inflamación. Valeria comenzó a darle unos pequeños martillazos en la cabeza y en casa uno Eva contestaba con un idioma diferente hasta que en el más fuerte comenzó a hablar español y tener control del idioma que deseara hablar. Con lágrimas en sus ojos nos agradeció y Comenzamos a darle medicamentos y masajes craneales para la inflamación. En uno o dos días Eva estaría fuera del Hospital hablando mas idiomas que todos nosotros.
Cuando me despedí de ella escuché un gran grito de una de las enfermeras y cuando llegamos una paciente de nombre Maribel había quedado frizada no se podía mover, parecía un cadáver, pero la máquina de pulso reflejaba uno bajo. Tratamos de acomodarle las manos, pero era imposible solo movía los ojos. Según su tabla clínica estaba por ronchas en la piel.
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Al alzarle la bata esa infección se había extendido y cogido un mal olor. También parecía mas profunda amarramos unas sogas al techo y comenzaron a alzarla para poder bregar en su espalda allí se veía como le había afectado toda la espina dorsal. Le untamos cremas y le inyectamos anestesia ya que la prenderíamos en fuego. Necesitábamos eliminar toda es carne muerta, infección y olor lo antes posible para operarla y las cremas protegerían su piel saludable y de que se extendiera el fuego.
En el patio del hospital le prendimos fuego y temblaba como si estuviera convulsionando, pero la anestesia la mantuvo dormida habla una gran peste y se observaba como la carne infectada se caía, gracias a las cremas el fuego poco a poco se extinguió eliminado toda la infección exterior. Aun tiesa era momento de abrirla y sacarle lo que le este causando toda la parálisis, pero lamentablemente al abrirla lo que encontramos no era bueno.
