En busca de la perfección

Mi Bebe

Tn trato de caminar pero un dolor en su cadera la hizo detenerse

Wel/Tranquila Tn no te muevas

Tenía miedo, en los ojos de Tn se reflejaba ese miedo de la ignorancia, ella no sabia que hacer, estaba totalmente congelada y de ese trance solo logro sacarla una fuerte contracción

Weliber llegó tomándola de la cintura, ayudándola a llegar a la cama, la recostó lentamente y corrió al baño por agua

Tn se quedó viendo fijamente a Jungkook, quien con sus manos en el cristal estaba a la expectativa de lo que pudiera pasar

Kook/Tranquila mi amor, todo va a salir bien

Tn/Te parece que todo va a salir..... Ahhhh

Kook/Qué pasa mi amor?!!

Tn/Duele mucho Jungkook..... Ahhhh... Siento que me abren la cintura.... Mierda¡!

Jungkook estaba desesperado, Weliber no salía del baño y contigo llorando la compostura se perdió

Tomó la toalla que Weliber había dejado tirada, esa que utiliza para secarse el sudor del rostro y tomando el vidrio con ella arranco grandes pedazos

La toalla estaba destruida al cabo de unos minutos y sin percatarse la sangre de sus manos empezaba a gotear

JUNGKOOK ¡!

Jungkook se detuvo al escuchar su nombre

Tn/Mi amor detente, mira tus manos

Jungkook se detuvo a ver sus mano que tenían astillas de vidrio incrustadas

Kook/No me duelen, puedo seguir...

Tn/No, no más, por favor detente

Weliber apareció con una cubeta llena de agua y la puso a tus pies, corrió fuera de la celda por camisas y trapos que pudiera utilizar

Justo cuando el llegó la cabeza del bebe empezaba a verse entre tus piernas, cayó desmayado con toda la fuerza que traía al correr

Kook/Mierda Weliber ¡! Despierta marica¡!

Tn/Que paso?

Kook/Se desmayo, el muy marica se desmayó, se rompió el osico porque sangra

Asustaste a Jungkook con ese grito que diste al sentir las contracciones

Kook/Tranquila mi amor, ya voy...

Tn/NO¡! Mira.... Tu te quedas ahí, no vas a perder la mano solo por esto, yo puedo solaaaaa¡!

Kook/Tn....

No contestaste más, estrujaste el colchón y te elevaste poco a poco en la cama para poder semisentarte y apóyarte en la pared

Respirabas agitada, pujabas con fuerza  cada contracción, en un momento de paz bajaste tu mano a tu entrepierna

Era un bulto realmente protuberante el que sentías en tu vagina, era la cabeza de tu bebe

La contracción llego otra vez, gritaste pujando con todas tus fuerzas

Llevabas una hora así y Jungkook seguía en la misma posición, viéndote calladamente con la expresión más de miedo y preocupación que de alegría

Sintiendo que morías te dejaste caer en la pared

Tn/No puedo..... No puedo más

Kook/Mi amor por favor no me hagas esto, yo se que puedes, eres una mujer fuerte, me lo has demostrado, no importa que hayas cambiado tu manera de hablar y comportarte sigues siendo esa novicia que busca la vida, no lo mates amor, por favor....

Las lágrimas de Jungkook parecían pequeños ríos, con tu vista nublada por el decaimiento te impulsaste otra vez sintiendo que esa contracción se aproximaba

Cerraste los ojos pues todo quedo a oscuras en un momento, en tu mano sentiste la cabeza de tu bebe, cerrando tus dedos al rededor de ella halaste un poco si presionarla tanto

Lo último que sentiste antes de desmayarte fue algo salir de ti y dejarlo caer en la cama, después de eso el silencio te atrapó

Pero no era así para Jungkook quien te llamaba a gritos al ver que tu no reaccionabas

El bebe no lloraba, esta tirado, inmovil al igual que tu en la cama

Le llevo solo 1 minuto destruir por completo el cristal que impedía su paso, era un gran agujero en la pared de vidrio, aun así no lo suficiente para evitar rasguñarse la piel del estómago y la espalda pero aun así paso, los cortes en sus manos eran profundos y sangraban a chorros al sacarse los trozos de vidrio

Pero eso no importó, tomo a su bebe en brazos y poniendo su boca en la del pequeño recién nacido empezo a soplar, debía darle aire, debía hacerlo respirar por si solo

Con sus ojos abierto miraba el rostro de su bebe mientras las lágrimas caían al ver que por más aire que le daba no reaccionaba

El tiempo se detuvo cuando al fin un lloriqueo se escuchó