Las noches, solo en las noches es donde más escribo cartas, en las noches es donde mi sangre se convierte en tinta para plasmar sobre una hoja de papel lo que siento dentro de mi ser, la cual se llama AMOR, derramo y derramo versos de amor, de lo que es ella, o para ser exacto; para demostrar al mundo la perfección que existe en ella, tal vez
tenga nuevo acompañante, la verdad no lo sé, solo sé que mi lado romántico, mi lado poético sigue escribiendo bajo la luz de la luna, sin ninguna interrupción.
Solamente puedo decir que sigo pensando en ella, sigo pensando en su ser, de cómo era, y pues ruego que siga así, que nada le haya llegado a cambiar, sus sentimientos, su
carisma, sus ojitos que al mirar a las estrellas reflejan una luz que no podrás ver o que tal vez se asemeje al arcoíris, también su cabello que todavía lo recuerdo con gran pasión esos rizos tan perfectos que cualquier humano podría enamorarse en la cual yo me incluyo.
Pero algo falta aquí, si todavía me acuerdo de algo no muy común sino de una cualidad muy grande por así decirlo, una cualidad que nadie podrá tener y que solo ella posee, si una cualidad que también es muy obvia de ver pero que no es fácil de provocar esa cualidad de la cual hablo es su sonrisa, ya que tiene un no sé qué, que podría que me vuelve loco, no solo a mi si no que al que la llegase ver, esa sonrisa tan hermosa que forma una curva la cual le hace hermosa por fuera, y de ahí mi pregunta
¿Dónde estás humana de venus?.
