capítulo dos

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Actualidad
Manchester; 7:00 am

En una cómoda cama descansaba un pequeño cachorro que cumplía doce meses de nacido. Precisamente hoy, 28 de septiembre del año 2023.

El pálido rayo de sol que se colaba por la ventana indicaba que tal vez habría un buen día si es que el diluvio por la llegada de otoño no lo opacaba. Septiembre estaba por terminarse y todo estaba sucediendo tan rápido como habían crecido las ramas de aquel árbol de mango que plantó un día, y tan rápido como el cuerpecito de su bebé presentó cambios en su metabolismo.

Doce meses significaba mucho. Pues muy pronto estará presentando sus primeros caninos, sus primeros pasos, sus primeras risas y su primera palabra. No podía esperar para enseñarle a decir papá y verlo transformarse en su forma lobuna. ¿Cómo sería?, ¿Sería un lobito peludo o un lobito de poco pelo?.

No podía esperar para ver crecer a su bebé, pasar todo el tiempo del mundo a su lado–mientras pudiera. Verlo jugar y caer de la bicicleta cuando le pida enseñarle. Su primer raspón, su primer día de preescolar, primaria y secundaria (aunque seguramente a esas alturas le odie por convertirse en una casta en pubertad con hormonas alocadas). No importaba. Él quería estar siempre ahí para él, porque es su papá y hay que recalcar, que es un padre orgulloso de serlo.

Sonríe de soslayo, observa sus finas facciones hacer pequeñas muecas por el intruso sol tocar atrevidamente su piel de bebé. Toca su suave mejilla y se deja llevar de nuevo por todo el viaje del amor paternal en su cabecilla.

Harry está enamorado de su bebé.

Le había costado trabajo dormir al pequeño la noche anterior pero no se podía quejar, él había querido tener un cachorro desde hace un buen tiempo y cuando al fin lo consiguió, lloró de alegría.

Era criticado por ser un Alfa Supremo y un cantante de rock mujeriego, sobre todo porque tiene un hijo, sin compañero. Pero a él poco le importaba, tenía la felicidad que tanto anhelaba. Sabía que teniendo o no una pareja conseguiría un bebé. En el siglo veintiuno, cualquier casta puede adoptar sin la necesidad de una pareja a su lado. Ser papá o mamá soltero ya no importa en esta sociedad lobuna. Lo importante es cuidar, amar y respetar; brindar un hogar, seguro y sano.

Él prometió cuidarlo y amarlo como si en verdad fuese suyo.

"Papá te ama pequeño cachorro."

Besa su cabecita con escaso pelo, toma sus manos delicadamente y las sujeta fuerte como indicando que él estará a su lado para siempre. Harry no sabe explicar el pinchazo en su corazón cada vez que ve a su criatura siquiera respirar.

El toque en la puerta de su habitación interrumpe el pequeño momento paternal. Corre y la abre en un intento por no despertar a su cachorro. Su hermana mayor aparece en su campo de visión; lleva la copia exacta de su sonrisa en sus facciones finas y como siempre, saluda como lo amigable que es.

–Buenos días H–La ahora castaña le devuelve el saludo cuando su hermano menor lo hace primero en un tono bajo. Le deja pasar y la observa olfatear el aire y sabe que se siente tan agusto como él por el tan suave aroma a bebé.

–¿Qué tal durmieron?, ¿Matthew te dejó dormir?–Pregunta esto último y sabe que la respuesta es un rotundo no por la mirada poco amistosa que le dedica. El alfa está tan cansado desde hace días. El horario de Matthew está cambiando y con ello sus rutinas.

–Diría que hemos dormido excelente pero estaría mintiendo–Deja caer su cuerpo al final del colchón y siente su cuello y espalda punzar un poco. Emma hace un puchero mientras acaricia la mejilla de Matthew.

rock&baby | LSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora