FANTASIE | KOOKNAM

Capítulo 13: Retrouvailles

No vio al moreno esa mañana, pero en cambio se encontró con Yoongi quien le dijo que Namjoon se sentía mal y que seguramente dormiría hasta tarde. Aún así le pidió la llave de la habitación y a regadientes el pálido se la entrego.
Cuando subió y entró vio el traje del moreno colocado a los pies de la cama. Vio el rostro sereno de moreno y deseó que la noche anterior pudiera ser diferente. No lo vería dento de un largo tiempo y quizás, si la suerte no estuviera de su lado, nunca más.

Se arriesgo a dejar un beso suave sobre los labios de moreno y salió de la habitación, Jimin esperaba en el taxi.

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Namjoon sintió el beso de menor pero peleó con su corazón para evitar abrir los ojos, cuando oyó la puerta cerrarse dejo que las lágrimas se deslizaran por su rostro humedeciendo sus orejas.
Se arrepintió al segundo pero ya no podía hacer nada, las lágrimas corrieron con ganas esta vez.

Un mes después.

Namjoon estaba sentado enfrente a un gran espejo y una mesa llena de cosméticos mientras una señora se encargaba de esmaquillarlo. La campaña con Balenciaga estaba llegando a su fin y pronto tendría que viajar devuelta a Francia.
Todo este tiempo se había mantenido ocupado estudiando, porque sí Nam había decidido estudiar diseño, le costaba pero podia mantener su cabeza ocupada y eso era bueno. Además tenía el apoyo de varios diseñadores, estos no habían dudado en ofrecerle ayuda.

Era Jueves y como siempre decido ir al bar calle abajo de su hotel. No para tener sexo, ya que eso se había vuelto una misión imposible. No quiere decir que no lo había intentado pero parecía que Londres estaba lleno de inútiles y había perdido las esperanzas. A raíz de esto su humor había estado caldeado. Obviamente se masturbaba pero eso no era suficiente como para aliviar toda la tensión acumulada. Sabía que había un motivo más profundo para su falta de suerte pero no quería profundizar en eso.

Sintió una movimiento a su izquierda y rodando los ojos imitó al hombre a su lado, "¿Porqué tan solo?", dijeron sus labios sin emitir ningún sonido, prácticamente haciendo lip's Sing.

_ No estoy solo, estoy con mi trago, dulzura. Miró hacia él hombre y vio que era un joven, casi rozando la ilegalidad. No le iban los jóvenes, bueno, solo uno. Esperaba haber sido claro pero se dio cuanta de que no cuando una mano le acarició la nuca.

_ Vamos, se quien eres, se la reputación que tienes. No te cuesta nada dejarme ese culito tuyo por un rato. ¿He nene?. Nam se irguio en toda su altura, le quitaba una cabeza al puberto, quien tenía una sonrisa soncarrona en victoria.

Lo que se ganó fue un puñetazo del moreno, quien decido irse para no causar problemas al bar, además dejó una buena propina por arruinar el ambiente.

Tenía que llegar a su apartamento, desinfectar su nuevo piercing y preparar las maletas.

Caminó a casa respondió mensajes de Yoongi, este último se estaba por casar y se pasaba el día llrnadole la bandeja a Nam.

El pálido le había mandado una foto de dos trajes.

_"¿Azul o Gris?". Namjoon se rio al leer el mensaje. Su amigo estaba peor que la novia.

_"Como voy a ser tu padrino recomiendo el Azul, resaltará mi color de pelo."

_"Esto no es sobre ti sabandija, pero esta bien".

Se preguntó si algún día el podría encontrar el amor cómo Yoongi, a este se lo veía tan feliz con Hoseok y les envidiaba.

[...]

Jungkook en cambio se encontraba desempacado. Se había mudado devuelta a la casa de sus padres, estos estaban dolidos por su separación con Jimin, no entendían cuando su hijo había cambiado tanto, una aventura no iba con su estilo de vida y personalidad. A causa de esto habían desarrollado una rechazo hacia el modelo del cual hablaba Jungkook.
Creían firmemente que este había seducido a su recto hijo.
Esta mas decir que Jungkook les había explicado una y mil veces pero estos parecían hacer oídos sordos.

Las cosas con Jimin se habían debilitado en semanas, al castaño le dolía ver a su novio esforzarse por salvar la relación, según el más bajo el estar separados los había debilitado pero Jungkook sabía bien que era otra cosa. Por días reunió el valor, aún así si en un futuro podían salvar si relación quería que está no tuviera hecha de mentiras.
Cuando le confesó todo Jimin este tuvo dos reacciónes, la primera llorar desconsoladamente lo que partió el corazón de su ex novio pero la otra fue la furia. Jungkook dejo que el más bajo golpeara su pecho desahogándose, porque se lo merecía. Pero tuvo que irse cuando los platos comenzaron volaron por el aire.

Dejo que el dolor y la frustración se manifestara en llanto en casa de sus padres, le dolía toda la situación, le dolía perder a Jimin y a Nam, pero sabía que estaba haciendo lo correcto.
Ahora se encontraba seleccionando la ropa de las cajas, no pensaba desempacar mucho pues tenía pensado conseguir un departamento. Quería a sus padres pero ya era grande para escuchar sus rezongos.

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Había guardado dinero de algunas sesiones durante el mes, por lo que está vez sí pudo hospedarse en una habitación de calidad. Estuvo debatiendo si ir a la ceremonia. Si no ganaba todo iba a ser en vano, pero ya no tenía nada que perder, además confiaba en su buen ojo y en las facciones de modelo.

Salió a comer por París. Ya no se sentía tan perdido, y había memorizado algunas frases en francés por su propio bien. Recordaba la cuidad como siempre, tan bella e histórica, parecía que se respiraba otro aire.

Reflexionó sobre su vida, la que había dado un giro de 120 grados sin Jimin. Ahora todo dependía de él, tenía libre albedrío de hacer con su vida lo que quisiera. Esa levedad en sus hombros traía un peso insoportable irónicamente. El peso nos ata pero nos da una dirección, un camino a seguir. La levedad nos suelta pero nos abre tantos caminos y direcciones que nos ahoga.
El había escogido la levedad y ahora tenía que decidir a qué volver a anclarse. Inevitablemente pensó en el moreno, no sabía si lo vería pero todo su cuerpo se sacudía al pensar en volverlo a ver.
A si mismo los pensamientos contrarios bombardeaban su mente, si no lo veía se decepcionaría pero si lo veía sería el momento más incómodo de su vida.

Ya satisfecho volvió al hotel y terminó unos toques de una sesión en la que estaba trabajando. Terminado eso debía alistarse para la ceremonia.
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Namjoon bajo a toda prisa del taxi y subió las escalera de dos en dos. La junta con la agencia había demorado mas de la cuenta y ahora sí no se apuraba llegaría atrasado.

[...]

La pierna de Jungkook no paraba de moverse, leyó por quinta vez el cartel en el asiento frente suyo, "Kim Namjoon" escrito en letras cursivas.
El moreno aún no hacía acto de presencia y ya estaban anunciando los grupos. Miró para todos lados y en un acto desesperado busco el número del moreno en su celular, no lo había borrado.
Al momento en que la llamada se atendió alcanzó a ver al moreno al otro lado del salón. Aún con la llamada en proceso observó al moreno, este tenía el cabello rubio platinado ahora. Pero la misma aura de superioridad y sensualidad, lo que si el nuevo color le pintaba más joven.
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Namjoon vio el nombre de contacto de la llamada entrante y respondió lentamente, sintió la respiración al otro lado de la linea y buscó el rostro de Jungkook a través del salón con el celular en su oído izquierdo. Una sensación se extendió en su estómago cuando se topó por la mirada atenta del menor, una sonrisa boba intento asomarse pero la contuvo. Oyó como Jean los llamaba a la plataforma y como él estaba cerca de está le hablo a Jungkook.

"Ven aqui, Jungkook".

El cuerpo del menor se estremeció cuando la voz grave de Namjoon llegó a sus oídos. Cortando la llamada camino hacia el modelo quien lo esperaba sonriendo.

Namjoon estaba tentado a abrir los brazos, como en una película cliché. En cambio tomó la mano del menor y juntos subieron las escaleras.

Hola! Acá les dejo la actualización, perdonen la tardanza y el que sea corto. Aún así espero que lo hayan disfrutado, nos leemos pronto.

Gracias por sus votos!