Tsuki no Tani

Prólogo

La noche, cuando la mayoría se queda en casa, cuando mas miedo se siente afuera, cuando los niños temen a los mounstros y fantasmas, pero, ¿Qué posibilidades nos ofrece? Para mucha gente la noche es maravillosa.

Piénsalo, esta oscuro así que nadie ve si le estas pegando una paliza a tu amiga, nadie ve cómo te tiras de un acantilado...

Y el miedo, ¿De verdad piensas que los fantasmas atacan por la noche, en otras partes del mundo en el mismo momento en el que estas dentro de tu cama tapado por tu fina sabana y temblando, hay personas que disfrutan de la luz del sol.

Y la luna, ese bello astro que se nos aparece en la Noche, que parece que tiene luz propia.

Mayu es una chica de 16 años que vive en Osaka, vive ella sola, recibe dinero por parte de su abuela quien se lo envia desde Tokyo, las nuevas tecnologías facilitan mucho ese envío.

Un domingo por la noche de abril de 2018, Mayu camina por las calles de Osaka, le dijeron desde pequeña que tuviera cuidado por la noche, pero ella no tenía miedo, observaba las flores de cerezo alumbradas por la luz de las farolas, y la bella luna que iluminaba su camino, Mayu de repente escucho unos pasos, las pupilas de sus ojos marrones rojizos se dilatarón aumentando su seguridad y se sujetó la coleta que hizo con su pelo castaño claro.

-¿Quién es usted? - Preguntó serenamente la joven.

Detrás de ella había una aciana vestida con ropa cara.

-¿Qué haces en la calle tan tarde? - Preguntó sonriendo la bella señora

-No es asunto suyo. - Afirmo Mayu con aires de superioridad.

-¿No crees que tu familia se va a preocupar? - Preguntó la señora indignada.

-Para mi no existe familia. - Respondió la joven firmemente.

Dejó a la anciana atrás y siguió su camino, saco sus llaves plateadas y abrió su piso que estaba en un bajo situado en un edificio cerca del mar.

Se acostó y encendió su Smart TV

-Mi familia, no existe, nunca lo aceptaré. - Se dijo a si misma Mayu entre susurros.

La joven Mayu se durmió llorando.