back to the 80's ; lm !

─ 彡♡#OO6:

| PARTE SEIS

“I don't give a damn 'bout my reputation”

Un chicle en el cabello, una malteada derramada un su cabeza "accidentalmente", una mezcla de kétchup y mostaza en su silla, un mal corte de cabello.

Nada funcionó. Y parece que mientras más le hago maldades a Eunji, más fuerte se hace. Papá cada vez está más cerca de ella, mamá se aleja con la mirada hacía abajo y Hye esta por arrancarse el cabello de raíz. Lucia apareció mientras Sonyoung le cortaba él pedazo de chicle en el cabello, diciendo “Mala idea, a Jongsuk le gustan las chicas de cabello corto". Y fue ahí cuando me di cuenta de que yo no servía para esto, a pesar de que la odiaba con todo mi ser era más fuerte mi ineptitud.

— Hemos hecho de todo y nada ha funcionado —Dijo Hye, en un susurro mientras mi mamá leía una revista sentada en él sillón a unos cuantos metros de nosotros.

— Entonces hay que usar la fuerza, tenemos que meterle la idea a Sonyoung que ambos se gustan — Dije yo, como si fuese la mejor idea del mundo. A Hye le brilla los ojos.

— ¡Tengo una idea! Sólo sígueme la corriente —Aclara su garganta, echándose el cabello hacía atrás— ¿Enserio eso fue lo que dijo Jongsuk de Sonyoung?

Me toma por sorpresa. Pero caigo en la cuenta de lo que se refiere cuando levanta sus cejas.

— Ahh... Si, ¡Sí! Dijo que tenía unos lindos ojos y que... Que... —Ambas notamos los indiferencia de mi madre, a lo que me hace exagerar la nota— ¡Que esta enamorado de ella! 

Hye se queda estupefacta. Mi madre baja la revista con fuerza y se me queda viendo sorprendida. En este momento deseo desaparecer. Siento el calor en mis mejillas.

— ¿Que dijo qué? —Sonyoung se levanta con rapidez, haciendo un ademán exagerado, que me recuerda a mi misma.

Hye me echa una mirada de apuro.

— Que... ¡Que esta enamorado de ti! Me lo ha dicho ciento de veces, cada vez que puede, que Sonyoung esto, que Sonyoung lo otro... —Veo la emoción en los ojos mieles de mi madre, me siento mal por mentirle, pero es que en realidad si me lo ha dicho. No en este año, si no cuando yo era una niña.

» — No pude elegir mejor esposa que tu madre, ¿sabes, Haneul? —Había dicho, sentado en él suelo mientras armábamos un rompecabezas de princesas en mi habitación— Estoy enamorado de ella hasta la médula, sus ojos, su sonrisa, yo... Estoy contento de que ella me haya elegido. La amo, y te amo a ti también —Se echó a reír, abrazándome con fuerza mientras besaba mis mejillas. «

Las lágrimas hacen que mis ojos ardan, siento él característico dolor de garganta, estoy apunto de llorar. Sonyoung no lo nota por suerte, pero Hye sí lo hace, ella acaricia mi espalda.

— ¿Y qué crees que deba hacer? —Me pregunta, sonrojándose. Le sonrío dulcemente.

— Ser tu misma, eso es lo que le gusta. Y cuando sonríes, también cuando te pones seria y arrugas la frente. También cuando te ríes y echas la cabeza hacía atrás como una niña pequeña —Mi voz se va a apagando a medida que recito lo que alguna vez me dijo y caigo en la cuenta; Mentiras. Mentiras. Mentiras.

Mi madre se inclina para mirarme, las tres nos hemos quedado en silencio.

— ¿Pasa algo, Haneul? —Me pregunta, Hye carraspea.

— No se ha sentido muy bien últimamente, iré a llevarla a casa —Dice, ayudándome a levantar del sillón de su casa, sintiendo como él suelo de mueve, al igual que los sentimientos.

El aire me golpea directo en la cara y cuando ya estoy afuera, lloro. Como cuando supe que mi padre le había dado el divorcio a mi madre. “La amo más que a nadie” repito en mi cabeza.

— ¡Mentiroso, mentiroso! —Digo con fuerza, queriendo golpear todo. Doy una patada a la mecedora, hundiendo una parte de esta. Papá era un mentiroso, Jongsuk era un mentiroso, ¿Que nos amaba? ¡No se hubiese ido con ella! Nunca nos hubiese abandonado como lo hizo, rellenando vacíos con regalos estúpidos en cada navidad o cumpleaños. Excusándose para no ir a mis festivales en la escuela... ¡Ahhh, Pero claro! Para ir a comprarle pañales y comida a su nueva familia sí tenía todo él tiempo del mundo.

—Haneul, tranquila —Hye se acerca, pero la empujo por el enojo.

— ¡No, Hye, nos mintió! ¡Todo este tiempo! Me dijo que nos amaba, que nos quería más que a nadie y ¡Mírame! ¿dónde estoy? Salvándole él pellejo de que no conozca a una mujer que se va a aprovechar de él...

— Baja la voz, Hanie, nos van a escuchar —Se preocupa. Echándole un vistazo a la calle vacía, mientras grito en el pórtico.

— ¡Que me escuchen! ¡Que todos me escuchen! Que Park Jongsuk va a abandonar a su esposa y a su hija por una zorra en un par de años, llamada Eunji —Grito, sacando todo él dolor que he guardado en años, la puerta de la casa se abre, dejando ver a Sonyoung con los ojos bien abiertos y sorprendida.

— ¿De qué estás hablando? —La voz de mi padre suena a mis espaldas, cuando me giro veo a su pandilla y a el estupefacto. Está molesto, lo veo en su cara. La sangre se me va del rostro.

No sé qué decir. No le puedo decir la verdad. Lucía aparece detrás de mi padre, pero nadie hace ninguna expresión de sobresalto. Sólo yo la puedo ver.

— ¡Haneul! ¿Qué hiciste? ¡Eres una tonta, arregla esto, arregla esto o ni siquiera nacerás! —Me asusto, ahora si que estoy asustada y comienzo a temblar. Pero el odio que siento por él hombre frente a mi con unos cuantos años menos no me hace pensar con claridad.

— Estoy hablando de lo maldito que eres —Lo empujo, si le hubiese echo esto cuando era mi padre posiblemente me hubiera castigado— Sonyoung ha estado enamorada de ti todo este tiempo y ni siquiera te has dado cuenta, te la pasas gastando tu amor y tu tiempo con esa Eunji que ni siquiera vale la pena.

— ¿Qué? ¿Sonyoung? ¿Eso es cierto? —Ahora meto en aprietos a mi madre, que abraza a la puerta sin mucho que decir. Me pongo frente a ella.

— ¡Dios mío, eres un ciego! —Le acuso, señalándolo con él dedo— La estas perdiendo Jongsuk y cuando te des cuenta que en realidad Sonyoung era la que valía la pena, vas a estar casado con Eunji manteniendo a un hijo que ni siquiera va a ser tuyo —Casi le escupo en la cara, perdiendo él control de la situación. Lucía me mira negando con la cabeza, Hye sabe que esto ya no tiene solución. Escucho el chasquido de los dedos de Lucía, que hacen hablar a Hyunjin, mi padrino.

— Eunji se acuesta con Namjoo, él chico de los bolos —Confiesa, bajando la cabeza avergonzado. Mi padre se gira a el.

— ¿Qué? ¿Cómo sabes eso? —Baja las escaleras del pórtico, caminando hacía el.

— Namjoo me lo dijo, se ha burlado de ti y ha dicho que Eunji también —Suspira encogiéndose de hombros— Tenía que decírtelo hermano, te mereces algo más que eso...

Continuara...