~No abras tus ojos~

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Era un día como cualquiera , la misma rutina, las mismas cosas, todo igual... Y es que su vida no era relativamente "emocionante" ya que aparte que no se conocía con nadie, ni nada de eso...

Como todos los días, al llegar la noche aquel chico se iba a la misma hora de siempre a "su lugar de inspiración" como solía llamarlo. Cuando ya estaba ahí, contemplando a la grandiosa luna como siempre, aunque esta vez era un poco diferente a todos los días que pasaba ahí, y es que... ¡No tenía ninguna idea! A pesar de que la luna estaba en unas de sus mejores fases para el la cual era "Luna llena" para ser exactos justo la que más le gustaba, ver aquella imagen de la luna totalmente encendida resplandeciendo en todo el lugar  haciendo un poco más que penumbra... Pero a pesar de todo eso, el chico no tenía nada, simplemente nada...

Después de pasar tantas horas pensando sin tener algo nuevo, se recostó en el pasto mirando de diferentes ángulos a la luna, sin pensarlo más dejó sus materiales a un costado donde los podía ver claramente, y a decir verdad... Estar en esa posición recostado en el pasto le provocaba cierta tranquilidad, escuchar el viento resoplando contra las hojas de los árboles, era una de las cosas que más le encantaban...

No supo que más hacer hasta que de pronto, entre los árboles escucho unas sonoras risitas apenas audibles, lo cual le provocó una cierta curiosidad de saber de dónde provenían tan repentinamente y a esas horas de la noche...

- ¡Hey! ¿Quién está ahí? —Pregunto mientras se sentaba frotándose los ojos—

- Heee~ —Aquellas risas cesaron totalmente en menos de un segundo, así como si se hubiera esfumado–

-Tsk pregunte algo... ¿Quién está ahí? –Un ligero enojo se apoderó de sus palabras–

De pronto, aquel chico que tanto reia salió de su "escondite", era un alguien bastante peculiar en su forma física, tenía el cabello de un tono totalmente claro, sus ojos eran pequeños y le daba cierto toque de ternura , su rostro era basta no fino pero no es que sea menos importante pero luego se empezó a fijar en sus mejillas, que al igual de sus labios eran ciertamente abultadas, hablando de su estatura... Este era un poco más bajo, totalmente perfecto a la luz de la luna

Sin decir algo más, este último se acercó lentamente sentándose a su costado para también apreciar la luna en el estado que se encontraba

- ¿Qué haces a esta hora aquí? Un niño como tú, no debe salir a estas horas sabes ¡Vete por donde viniste y no vuelvas! –Hablo con un poco de brusquedad hacia el más bajito de cabello encendido–

–El más bajo suspiro pesadamente ante las palabras, lo que menos le gustaba a este, era que hablen sin conocer la situación– Pues... Siempre que hay luna nueva vengo, y me siento aquí mismo, se podría decir que es mi frase favorita de todas las lunas ¿Logra comprender eso señor gruñón?

-Tsk... Claro, como si yo fuera a entenderte con ese tipo de cuentos... ¡Y no me llames "Señor gruñón"! Tengo nombre y es YoonGi ¿Te quedo claro?

-Humm bueno, perdón señor ¿YoonGi? Y ya que nos estamos presentando, yo soy JiMin, un gusto –Giro su cabeza a ver al contrario, dibujo una sonrisa en su rostro y estiró su mano para estrecharla en forma de saludo, lo cual fue rechazada por el contrario, haciéndolo enojar–

-¿Qué es lo que quieres realmente? ¿Por qué te muestras justo en mi peor momento? ¿No tienes nada que hacer? Pues yo sí y eso no es de tu importancia

- Wow... Una pregunta a la vez ¿Si? Pues sobre "Que es lo que quiero realmente", no te entiendo en lo mas mínimo perdón, solo soy alguien que vino a pasar el rato como siempre y justo estabas aquí ¿Eso responde tu pregunta?

"°•Nuestra Luna•°" (yoonmin) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora