2. Tus Amigos

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Narrador: Felix

-Adios, las quiero mucho, tengan buena noche- gritaba el pelinegro mientras movía la mano de forma exagerada. Yo lo observaba de reojo aunque realmente no le prestaba mucha atención, estaba perdido en mis propios pensamientos...que se supone que haga ahora- Venga, mi departamento queda un poco lejos, pero igual tendremos que ir a pie, a esta hora no conseguiremos carro sin el riesgo de ser ultrajados.

-¿Tu departamento?- pregunté un poco desencajado

-Por lo que me dijiste no puedes ni tienes intenciones de volver a tu islita magia aún y al menos que quieras dormir en la calle, lo cual por experiencia no es muy cómodo, iremos a mi depa- explicó mientras se encogía de hombros y metía las manos en los bolsillos de su pantalón.

No sabría explicar por que pero había algo en su actitud relajada que me hacía enfurecer. yo le había contado todo lo que había pasado en esos últimos ¿años? por lo visto habían sido años, el tiempo en Nunca Jamás se siente tan diferente. Y también le dije lo que sombra había dicho que pasaría y aún con todo eso el mantenía su expresión idiota y fanfarrona.

Suspiré para mis adentros.

Tal vez le tenía envidia, extrañaba esa época en la que yo podía actuar de esa manera, abandonar mis ocupaciones con los niños perdidos de vez en cuando para ir a dormir a la playa con la única preocupación de enfrentar la ira de Peter Pan.

-Peter- su nombre se escapó de mis labios en un suspiro

-¿Dijiste algo?- preguntó el idiota de gran sonrisa, negué- Deberías borrar esa cara larga tuya, no te recordaba tan amargado

-Perdóname si temo por mi gente y lo que pasará en el mundo- Alex rodó los ojos y dejo escapar y ligeramente audible "exagerado"-Mira, lo único que necesito ahora es alguna forma de convencer a _______ de volver a Nunca Jamás conmigo, tengo menos de 24 horas para hacerlo.

-Mira, preocupandote no lograras nada, para pensar necesitas tener la mente clara y para tener la mente clara necesitas relajarte, como yo- rodé los ojos

-Yo no se si tienes la mente clara o vacía- él exageró una mueca de indignación

-Escúchame, Mr. Preocupon, aunque suene muy egoísta me importa muy poco si tu islita mágica se va al carajo, lo que más me importa es _________ y la última vez que estuvo involucrada en todo esto salió lastimada, simplemente no debiste volver a su vida- note un breve enojo nacer en su mirada y mi corazón estrujándose conatr mi pecho

-También era mi amiga- dije intentando que mi voz no sonara quebradiza

-Lo se- respondió colocando una mano en mi hombro y volviendo a suavizar su mirada- por eso no te mande al demonio cuando te vi, por que aunque _______ no lo recuerde, tú, el duende verde y toda la islita fueron importantes para ella, en especial el duende. Y aunque mi instinto protector quiere alejar todo eso de ella se que también es parte de _______ y no me perdonaría lastimarla de esa forma...otra vez.

Esas palabras sellaron la conversación, el resto del camino lo hicimos en silencio, aunque no se si realmente fue uno incómodo. Tampoco apartó su mano de mi hombro, parecía estar sosteniéndose para no caerse con todo el peso que yo le había pasado y me sentí culpable. Por otro lado agradecí que no retirara la mano, era reconfortante porque haber vuelto a ver a la Enana y ver que no me reconocía en lo más mínimo había sido más doloroso de lo que pensé. Yo recordaba muy claramente el día que ambos desaparecieron y como solo Peter regresó, pero no parecía el mismo Peter Pan de siempre, se veía como un Peter Pan que había fallado. No quise creerle cuando dijo que ______ se había ido, que nos había olvidado, yo realmente no sabía lo que era tener un amigo (a parte de Pan), pero sabia que los amigos no se iban y te olvidaban tan fácilmente y creí que, tal vez después de correr tanto juntos, _____ nos hicimos amigos. Sin embargo, Peter se veía tan destruido ese día y los que siguieron que decidí no indagar más.

Por Siempre, Para Siempre (Version Rayis)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora