Cosas Random Y Así Nomas

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Tod@s sabemos lo complicado que es tener el pelo largo y lo difícil que resulta peinarlo. Bien esto es lo que susede, por la mañana Zak se había levantado de lo más bien, tranquilo, dispuesto a empezar su día de la mejor forma posible. Ya se había bañado, cambiando y demás, sólo le quedaba cepillar su cabello, ¿Cosa fácil, no? Pues no. Su pelo en verdad costaba mucho desenredarlo, casi parecía que tuviera vida propia.

Media hora más tarde.

Ya había considerado cortarse el pelo. En la entrada de la sala se encontraba Francis viendo como sufría. Se acercó sentándose a su lado para luego quitarle el peine.

-Oye-. Se quejó el menor de los sábados.

-Daja que te peine yo o sino terminarás quedandote calvo-. Dijo con un claro tono de burla.

-Has lo que quieras-. Se rindió dejando que su pareja empezará a cepillar su pelo.

-Depues de todo soy mejor que tu en todo-. Dijo en broma, pero se ganó un fuerte codazo en la costilla, quedaron en silencio hasta que el peli-acua acabo- Listo-.

El moreno se miro en un espejo de mano, vaya no le había quedado nada mal. Francis le había echo una coleta alta dejando libre la estrella que formaba sus mechas blancas.

-Siempre me gustó tu pelo blanco-. Enredo entre sus dedos en la parte de las mecha albinas, luego beso su nuca y después mordió el hombro del moreno haciéndolo gemir- ¿Y qué te parece si ahora te despeino un poco?-. Pregunto sin dejar de repartir besos por su hombro y girarlo un poco para atacar a sus labios.

-O-Oye, espera-. Hablo entre el beso, se giró para sentarse en las piernas del blanco y abrazarlo por el cuello-. Recién terminó de bañarme-.

- No dijiste no-. Empezó a besarlo otra vez.

-Pero tampoco dije que si-. Le corto el beso dispuesto a levantarse.

-Y eso es suficiente para mi-. Lo atrajo hasta el para que en un rápido movimiento quedar entre las piernas de Zak y besar su pecho el cual no tenía camisa mientras el moreno soltaba pequeñas risitas entre cada gemido.

Y todo terminó con resultados sexuales.