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Abro los ojos. No sé dónde estoy. Me remuevo en mi lecho. Me duele la piel, siento pinchazos por todas partes. Comienzo a gemir. Entra una mujer vestida de blanco y trata de tranquilizarme. Apenas la oigo. Sin embargo trato de calmarme para oírla, para aclarar mis dudas y salir de mi pesadilla, que apenas recuerdo.

-Hola, pequeña.

Abro la boca, pero no se como responderle al principio.

-Hoooola- consigo responder.

-¿Cómo te llamas?

Un segundo. Cómo me llamo. Quién soy.  Qué hago aquí. Qué está pasando. Desde cuándo.

-¿Có-como me-me llammmo?

La enfermera me mira sin comprender. Se la ve angustiada.

-¿Qui-qui-quién soy?

La mujer se acerca a mi y me empuja suavemente sobre el colchón, sujetándome para que no caiga de golpe. Vuelvo a removerme inquieta. Me duele la piel, tengo pinchazos. Me duele la cabeza estoy mareada. Me duelen los huesos, están demolidos. Me duelen los músculos. Me duele todo. Gimo y comienzo a llorar. Ni si quiera sé quién soy. Y al parecer la enfermera tampoco. Entre el llanto, me acabo durmiendo, cayendo de nuevo en un sueño profundo, plagado de pesadillas.

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⏰ Última actualización: May 08, 2019 ⏰

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