Único. 1/3

4.1K 463 102
                                    

Baekhyun era popular. Lo hacía todo bien. Sabía cantar, tocar el piano, bailar, los deportes se les daban genial, era guapo y todos estaban locos por él.

Siempre estaba bien vestido y era amable con todos, era muy dulce y divertido.
Pero a Chanyeol le parecía una perra chillona.

Se veía el niño de papi que a todos parecían adorar.
Su pelo rubio brillaba como oro. Y se ponía maquillaje en los ojos para acentuar que era gay. Demasiado gay para ser hombre.

Eso le daba asco, esa forma tan femenina de ser, su sonrisa tierna, hasta sus pequeñas manos eran desagradable.

Le gustaba seguro que le dieran por culo haciendo el misionero y gemir suavecito para que no vieran que era una zorra.

Para Chanyeol, Baek era aburrido. Simple. Uno más.

Eran vecinos, cuando salían a la misma vez de casa, Baek lo saludaba y sonreía con ternura, y eso era desagradable e incómodo.

¿No veía que para él era insoportable?

Chanyeol era como el tipo duro y chulo del instituto. Camisetas pegadas, chupas de cuero (sintético, porque era un chico malo, pero encontra del maltrato animal)
Tatuajes por todos lados, y piercings hasta la punta de la polla.
La gente se apartaba levemente de él en el metro y las chicas se asustaban.

Y para él no estaba mal que lo hicieran, es gracioso.

Aún le parecía más divertido como la ventana de su cuarto daba a la habitación de Baekhyun y lo veía muchísimas veces desnudarse sin que se diera cuenta. Hasta esos momentos no le había importado ver el cuerpo femenino de su vecino contornearse por su cuarto sin que se diera cuenta de que lo veía.

Pero... Todo resultó incómodo verlo desnudarse completamente, tumbandose de espaldas abriendo sus piernas dejando ver demasiado, porque justo estaba frente a la ventana.

Chupó sus dedos con los ojos cerrados, disfrutando.

—No puede ser... —estaba con la mandíbula suelta y casi riendo cuando vió como Baekhyun bajó sus manos para meterse los dedos dentro de su entrada.
Baekhyun brió su boca en un estado de shock placentero arqueandose.
Y casi por un momento, Chanyeol quiso escuchar como se oiría gimiendo.

Sacó su dedo y volvió a meterlo, con lentitud, hasta que metió otro y otro.

La polla de Chanyeol saltó y se removió incómodo sin apartar los ojos del culo dulce de su vecino.

Baekhyun abrió los ojos y miró a Chanyeol con una sonrisa burlona, movió los labios susurrando algo.

—Fóllame.

Chanyeol lo observó y su vecino volvió a chupar sus dedos sin despegar los ojos de los suyos.

—Ah, Chanyeol... —gimió metiendo con fuerza sus dedos y tocando sus pezones.
—Chan-chanyeol- oh, chan

Chanyeol sonrió incrédulo de ver como el chico del sexo vainilla se esté follando él solo, provocadolo.

Baek se dió la vuelta, con sus manos y rodillas, aplastando sus mejillas contra la cama y se tocó la polla masturbándose rápido y gimotenado el nombre de Chanyeol.

Candy Where stories live. Discover now