Always & Forever

Lo Siento

Spencer se dirigía a Colorado, después de muchas excusas para que las chicas no la siguieran, porque sabía que si Emily la llamo solo a ella...era por una razón, condujo por 15 horas sin detenerse, no conocía esa ciudad así que su mejor amigo seria Google maps

La castaña alta salió de su auto al llegar al centro de la ciudad, según la información que Frank le dio, el teléfono público estaba a unas cuadras de donde estaba, decidió dejar su auto estacionado y caminar, el lugar era un desastre; era como si estuviera en lo más bajo de nueva york, ese olor a basura y contaminación era muy fuerte para ella...miro a su alrededor hasta ver una cafetería, quizás un café cargado le ayude a pensar.

Entro algo calmada, le recordaba mucho al Brew donde vivieron muchas cosas juntas con sus amigas; extrañaba mucho esos días, pero, aunque quisiera, no era posible regresar el tiempo

—Muy pensativa— dijo la camarera, provoco un pequeño salto de Spencer

—Lo siento— sonrió simpática, le recordaba a Emily, eran muy parecidas, morenas, ojos cafés, mirada de no te juzgare.

—No importa...puedes darme un café— la camarera salió buscando lo que pedía y regreso casi al instante, al lado de Spencer había un hombre, algo viejo y un camionero comiendo plácidamente su desayuno, no parecía importarle, pero había algo extraño en este lugar.

Spencer pov

—tu café...¿no eres de colorado cierto?— negué tomando de mi café, necesito encontrarla, no puedo estar desaparecida por muchos días o las chicas se enteraran y preguntaran; solo no quiero meterme en más problemas

—que te trae por aquí? — esta chica se miraba muy simpática, pero, Dios, era muy preguntona igual que Emily

—Busco a una amiga— dije bajando la mirada, me caía bien...creí que la mayoría aquí eran raros...o al menos así parecían

—Oh, quizás la conozco ¿cómo se llama? — sonreí un poco, no creo que la conozca, pero por mi experiencia de ano estaba mal, tener algo de ayuda y más si se trata de una persona sin paradero

—Emily— al instante escuche una taza caer al suelo, era el hombre a mi lado, se sorprendió pude verlo en su rostro, la camarera se enojó y comenzó a limpiar el desastre y él estaba todavía sorprendido; me miro por unos segundos y luego salió, no dude.

Lo seguí sin que se diera cuenta hasta que subió a su auto; ¿lo dejo irse? No puedo, corrí hasta quedar frente a su auto; el acelero, pero al momento de verme se detuvo haciendo que el auto se apagara; siempre funciona ese truco.

—pero que te pasa!? ¡¡Pude haberte matado!! — grito el señor enojado, no lo culpaba, pero debo encontrarla y llevarla lo más rápido posible

—Te asustaste cuando dije el nombre de mi amiga...?— dije sin rodeos, él se asustó e intento subir a su auto pero lo detuve

—No puedo dejarte ir...tú sabes algo— intentaba intimidarlo; me miro suspirando desesperación

—Emily Fields, ¿la conoces? — el hombre bajo su cabeza, y asintió; mi corazón se detuvo, no podía creerlo

—¿sabes dónde esta?—

—pero no puedo llevarte— mi rostro se tornó a confusión, Emily estaba viva y no podía llevarme, definitivamente él la tiene bajo custodia o algo así, y ella debía hacer algo porque nadie más podía hacerlo

—Si le haces algo te juro que...—

—No! Espera...yo no le haría daño...ella es como una hija— dijo asustado, quería no creerle, pero no parece una mala persona, al menos para mi