×30 Days OPT× +18 Goldy

🔥Day 20🔥

Ruidoso y exagerado.

—¿Verdad o reto? —preguntó la rubia de ojos azules.

—Verdad —dijo en respuesta Fred.

—Fred, es la tercera vez seguida que dices verdad —hizo un puchero Freddy.

Los tres chicos estaban en la mansión de los gemelos claros. Era una pijamada entre parejas, Goldy, Golfred y Joy con su novio, un castaño claro, con ojos color azules y piel blanca llamado Thomas. Los activos estaban en la cocina preparando más botanas para la noche pues Freddy y Joy eran amantes de la comida nocturna. Mientras los pasivos y la chica jugaban para no aburrirse o quedarse dormidos.

—Dejalo, Freddy. Mejor que responda la pregunta...em... Ya se, ¿En dónde fue tu primera vez? —sonrió con malicia.

El azabache trago saliva con un sonrojo, sus compañeros lo miraron muy atentos, no perdían la vista de el, incluso pensaba Fred que llegaría una mosca a meterse por los ojos.

—Fue en mi clase de catecismo. En ese tiempo solo eran momentos de diversión, Gold fue el tercer hombre en mi vida —se sonrojo más desviando la mirada.

—¿¡Qué!? ¿¡Cómo que en catecismo!? Fred en ese tiempo tenías trece años. ¡Trece! —se alteró su gemelo.

—Ella preguntó, yo respondí. Aparte, es mi culo y yo sabía con quien rompermelo y con quien no —contraatacó el de orbes grises.

Los ojis azules se quedaron callados unos segundos, cuando el silencio fue roto por la menor de ellos con bullicios animando al de ojos grises. Freddy solo suspiro aceptando la derrota.

—Bien, Freddy. Tu turno —sonrió su hermano menor por tres minutos— ¿verdad o reto?

—Reto.

—Tienes que vestirte como una chica, maquillarte como una y peinarte como una. Tienes que esperarlo en su cuarto —sonrió ladino frunciendo el entrecejo.

Freddy se sonrojo de golpe, la chica emocionada se ofrecía para ayudarlo a arreglarse y el último reía a carcajadas por lo que veía; antes de que el castaño soltase una palabra ya lo estaban arrastrando a la habitación de la rubia. Fred salió de ese salón y se dirigió a la cocina  donde los otros tres ya preparaban lo último para marcharse con sus novios.

—Amor, ¿Paso algo? —lo miró Gold.

—Ho nada, nada. Solo quería ver porque se tardaban tanto —sonrió.

—¿Dónde están Freddy y Joy? —preguntó Thomas.

—Mi hermano esta cumpliendo un reto, Joy lo esta ayudando a terminarlo —se acercó al albino abrazando lo por la nuca.

Gold lo tomó de la cintura, sonrió con burla al darse cuenta de ese dichoso reto, ambos rieron confundiendo a los otros dos.

—¿Sabes es peligro que corre? —lo Miró Gold.

—Si, pero el se lo ganó. Pero ya basta o harás que estos lo descubran.

—Por eso te amo.

—Yo también me amo —rieron por el comentario, para después darse un beso.

Todos se dirigieron al Salón, Joy ya estaba sentada en un sofá jugando en su celular. Ordenaron a Golden irse a su cuarto, este confundido y demasiado dudoso aceptó caminando al segundo piso; no tardo en llegar a esta, que al abrir la puerta vió a Freddy sentado en su cama con una falda corta de color blanca, una playera con tirantes de spaghetti azul cielo y sus piernas eran cubiertas por unas medias negras. Sus labios tenían brillo labial con un poco de sombra en sus párpados.

—¿Q-Qué te paso? —quedó boquiabierto.

—Fred me reto a esto... —se cubrió el rostro avergonzado.

—Con razón Gold y Fred se estaban riendo... —entró cerrando la puerta.

—Son unos idiotas. Pero dime que no me harás nada —se descubrió los ojos mirando al Rubio.

—Mi amor, tu de aquí no sales hasta el lunes.

—E-Estamos a viernes...

—¿Crees que eso me detiene?

—Mierda...

[...]

La habitación estaba llena de gemidos (por no decir gritos), suspiros, rechinido de la cama y demasiado calor, la pareja estaba disfrutando la sensación de tenerse. Golden se encontraba recostado en medio de la cama mientras Freddy se auto penetraba dando saltos bruscos, el mayor para tener más control tomó la cintura ajena y movía sus caderas teniendo más contacto.

—M-Me voy a volver... A correr —aviso el castaño.

El más alto solo asintió y sintió como su miembro era apretado en el instante que su pequeño se corría, provocando que el también lo hiciera; pero eso no era todo, cambiaron de posición como ya habían hecho las tres veces anteriores, su nueva pose era de V donde el acostado ahora era Freddy abriendo las piernas para posarlas sobre los hombros del contrario, una de cada lado, mientras Golden estaba entre las piernas brindando más embestidas disfrutando de la vista.

—¡Hay, Golden! ¡No pares! Ah~ —gritó en gemidos al sentir su punto tocado.

El nombrado como buen activo, aumentó la velocidad haciendo moverse la cama levemente mientras los dos gemian de una manera tan necesitada y excitante que cualquiera pensaría que estaban viendo una película porno. Les gustaba acruarla, pero nunca habían pensado en gravarse.

Pasaron viernes, sábado y domingo, y ellos no salieron de la habitación. Una persona se acercaba y solo escuchaba los gemidos y la cama, debían agradecer que su abuelo y su padre habían salido de viaje a Londres.

Aiuda v": no tengo inspiración...