Harry comienza a hablar con Louis sobre sus gustos y ambos pudieron notar que tenían mucho en común. Luego de un tiempo estas dos plantas se hicieron grandes amigos y sin darse cuenta comenzó a fluir el amor entre ambas plantas. Un día Louis decide confesarle todo lo que sentía por el árbol Harry y para su sorpresa Harry también tenía planeado confesarse el mismo día. Ambas plantas se confiesan y así se crea el vinculo que solo la muerte podrá romper.
