Prologo

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Me encontraba en la torre Montparnasse de París, estaba cansado, pues había corrido mucho para llegar allí tratando de escapar del insomnio o de la locura, si es que por lo contrario ya había caído en ellas y hacia lo que estas me pidieran. Oí voces dentro de mi diciendo que me matara, que me fuera de este mundo lleno de locuras pues siempre habrá un espacio mas en el infierno, las manos me temblaban, una gota de sudor me pasaba por la frente llegando a la barbilla creando un canal de agua salada que cubría de extremo a extremo mi cara, saque un pañuelo de mi bolsillo lentamente me seque con una delicadeza que nunca tuve luego toque algo frío, tan frío que se me puso la piel de gallina, tanto por el uso que se le tiene a  dicho objeto como por el frío del metal inoxidable que reposaba en mi bolsillo y aparte con un clima tan helado... Era una bala, recordé que la llevaba ahí, aparte de eso había una pistola ensangrentada en mi bolsillo de la chaqueta, un arma que me traía malos recuerdos, sera el destino que unió todas estas concurrencias por un motivo o solo era coincidencia,apuntando el arma a mi cabeza sentí una Brisa tan helada como mis sentimientos después de lo que paso unos días antes, cuando percibí esa brisa pensé esta sera la ultima sensación que sienta, me despedí de este mundo al que conocemos... Un disparo, un muerto, unas sirenas que alarmaban y un grito ahogado fue lo que paso cuando la bala salio rumbo a su destino el de perforar el frío, asustado, tembloriento y sin esperanzas cuerpo, apagando la fugaz antorcha de la vida.

Cronicas de un suicidioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora