Al pisar el campus de mi colegio algunas de las personas me miraron con asco, haciendome sentir la peor basura que pudo haber pisado ese lugar, en ese momento.
Aún faltaban 5 minutos para que tocara el timbre (chicharra, campana, como le digan en su país) demoraba 20 minutos en venir al colegio, en esos 20 minutos lo único que hago es caminar sola por las calles de Sydney, aquí no tengo amigos, todos me abandonaron hace 2 años, pero esa es una historia que no quiero recordar
Todos comienzan a entrar a sus respectibos salones, claro acaba de tocar el timbre y yo tengo que hacer lo mismo ya que no quiero llegar tarde.
Al entrar a mi primer clase, matemática me sente en el fondo mirando al profesor Ethan, pero sin prestar atención, despues de unos 10 minutos de clase, entra la directora, mirando a todos los alumnos y saludandolos muy amablemente.
Directora: Chicos y chicas, primero que nada buenos días
Todos saludaron pesadamente a la directora, nadie sabe como puede estar de tan buen humor a las 7 de la mañana.
Directora: Necesito la ayuda de 2 chicos de la clase, ¿quien se ofrece?
En ese momento todos levantaron sus manos, desesperados por salir de matemáticas, menos yo, en realidad me daba igual.
Directora: Wow que cantidad de voluntarios, okey... elegire a.... Sanders.
En ese momento todas las miradas se posaron en mi, que horror.
Directora: Señorita Sanders, sigame -y se encamino a la salida de la clase y la seguí-
Afuera se encontraba Luke, quien estaba en otro salón, pero aveces coincidiamos las clases, verlo ahí parado me produjo en sentimiento raro en mi estomago, pero decidí ignorarlo, tanto a el, como a ese sentimiento de nervios mesclados con ¿amor? no lo se..