006 |Final.

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©|2000 Palabras.

Hyunjin después de ser casi descubierto tuvo que inventarse una muy buena excusa y salir practimanete corriendo de la casa de Félix.

Todo el asunto del enamorado de su mejor amigo y tener que descubrirlo lo estaban comenzando a enfadar, Chan era una persona dura cuando hablábamos de secretos y lo entendía pero la inquietud por saber quién le estaba robando el corazón al menor simplemente no dejaba de picarle, cuando su mente se enfriaba y pensaba las cosas decidía dejar todo de lado y seguir adelante pero cuando veía el celular de su amigo solo, era como si un cable en su cabeza se desconectará y solo existían él, el portátil y la inmensa necesidad de descubrir a la persona.

—Hey babas — Félix se acerco a su mejor amigo palmeando ligeramente su espalda haciendo que este pegara un pequeño salto de susto —Tengo que quedarme a limpiar el aula 1, ¿Te quieres ir adelantando?

Hyunjin lo pensó un momento y miro el reloj en su muñeca, era temprano y no tenía nada que hacer además si lo ayudaba terminaría antes

—Te ayudaré

—¿En serio? —Félix sonrió con emoción y más al ver como el más alto movía su cabeza en forma de aceptación —¡Gracias! ¡Gracias!, en verdad me has salvado

Félix se abalanzó sobre su amigo abrazandolo haciendo que ambos se de tuvieran en medio del pasillo, Hyunjin abrió sus ojos con sorpresa ante el repentino acto de su amigo mientras sus mejillas se tornaron de un leve rojo, pasaron unos segundos así hasta que Hyunjin cayó en cuenta de que estaban en medio del pasillo y la hora que reflejaba el reloj sobre la pared decía que los alumnos comenzarían a salir, con su mano palmeo un poco decepcionado la espalda de Félix ya que quería tener a ese pequeño koala aferrándose a él un poco más

—Bueno bueno, no es para tanto — El cuerpo de Félix se alejo mientras mantenía una sonrisa traviesa — sólo me deberás una grande

—Lo que digas — dicho esto se dio vuelta comenzando a caminar — vamos que el deber nos llama






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La cara de asco de ambos era un poema, el aula que les habían asignado era una de las aulas donde se había llevado a cabo un convivió pero por lo que supo Félix había terminado en una guerra de comida, así que todo era un completo desastre.

—¿Realmente tenemos que limpiar esto? —Pregunto Hyunjin dando un paso hacia atrás con el estómago un poco revuelto

—No puedo creer que me castigará de esta forma —Dijo tapando su nariz, miro a su amigo y vio como su mirada se transforma en curiosa— ¿Recuerdas la pila de libros que lleve ayer?

—Amm.. S-si —Dijo avergonzado al recordar la forma en que lo habían descubierto y en la que había huido

—Se me cayó un vaso de jugo en uno de ellos y por lo que supe es carisimo, mi madre no quiso pagarlo por supuesto así que la única forma de pagarlo es esta — Dijo abriendo sus brazos hacia aquella aula sucia —Estas a tiempo de irte si quieres —Dijo poniendo unos guantes y tomando una de las escobas

—N-no, te ayudaré —Imitó la acción del más bajo, para luego ambos adentrarse a aquel desastre de aula.

Pasa casi una hora de limpiar y de vez en cuando jugar entre ellos, por fin habían podido terminar con aquel desastre, ahora todo se veía impecable y el suspiro de satisfacción no tardo en aparecer por parte de ambos, no terminaron sucios pero Félix si tenía una que otra mancha en sus brazos así que dejó a Hyunjin recogiendo lo que habían utilizado para limpiar mientras el iba limpiarse.

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