Hay días tan fríos que aún con todos mis abrigos no me caliento como cuando me abrazabas
Hay secretos tan grandes que terminó revelándote
Hay un gran muro de indiferencia entre nosotros
Hay momentos que pasamos juntos y siempre estarán en mi memoria
Hay todo un mundo que sigo conociendo sin ti
Hay miradas tan profundas que llegan hasta el alma
Hay un amanecer tan carmesí que me recuerda a tus labios
Hay un ruiseñor que me canta todos los días
Hay negro y blanco en tus sueños
Hay lugares que me hacen sonreír recordándome tú presencia
Hay tanto que extraño de ti
Hay tan poco que me dices
Hay un hasta luego
Y hay un hasta siempre