¿Qué pasó con nosotras? | CACHÉ |

La Llamada

Después de esas palabras nadie volvió a decir nada, solo me limité a ver por la ventana y tratar de que mis lágrimas no cayeran.

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Me levanté gracias a un intenso dolor en la cabeza, el día de ayer no había sido el mejor que digamos y eso parecía estar dando resultados el día de hoy.

Salí de la habitación notando a Calle mientras esta ponía el desayuno en la mesa, como siempre tan devota sin importar lo ocurrido.

Decidí no decir nada y solo me limité a entrar al baño para hacer mis necesidades y lavarme la cara, una vez terminado salí del baño y pude ver a Calle ya sentada desayunando y como siempre mi lugar enfrente de ella.

Caminé hacia este y me senté para disponerme a desayunar, aunque no podía negar la incomodidad que había en el ambiente.

Calle: Aún sigues pensando (no de que piense en el tema, sino que piense que deben darse un tiempo) lo de ayer? /dijo mientras esta veía la comida

Poche: No...de echo nunca lo pensé, solo fue el impulso del momento, Porqué? A caso tu queires? /dije y no pude evitar sentir como mi voz se rompía

Calle: No bueno - fijó su mirada en mí - Yo lo dije sin pensarlo, solo...que no me gusta que seas celosa con ella, sabes que te amo y nunca te sería infiel, por lo que me lástima que supongas algo que nunca va a pasar.

Aquel dolor de cabeza desapareció cuando aquella plática empezó a tomar forma.

Poche: Lo siento, no volvera a pasar, no con ella.

Y ahí fue el momento en donde todo lo que pensaba de las insinuaciones de Pau a Calle las enterre, quien diría que por no darle un alto, en el futuro me esperaría una gran sorpresa.

Sólo me dedicó una sonrisa y sentí mi corazón más aliviado porque al fin ese tema no se volvería tocar y nunca tendríamos de verdad un "darnos un tiempo", al menos yo no lo permitiría.

Una semana después...

Me encontraba arreglando las cosas de la despensa pues con el poco dinero que había obtenido gracias a que rente mi equipo de fotografía, había podido llenar nuevamente la alacena.

Escuché al fondo el sonido de mi teléfono, limpié mis manos y caminé hacía la mesa en donde se encontraba, ya en mis manos noté un número desconocido.

Llamada entrante
Desconocido
Poche: Hola?
X: Maria José Garzón? /frunci el seño al escuchar mi nombre
Poche: Sí, es ella, quien habla?
X: Felicidades Señorita, a sido aceptada en el puesto, esta contratada /dijo con un pequeño toque de alegría
-No dije nada, estaba en shock, de verdad lo había logrado
X: Bueno?
Poche: A-a sí, estoy aquí /afirme aún desorientada
X: Mañana a las 9 de la mañana se le espera en la empresa para firmar el contrato.
Poche: S-sí, ahí estare, gracias
Llamada terminada

Cuando al fin la llamada se terminó di un pequeño salto y un grito de alegría, se había terminado nuestro tiempo de necesidades, ya no le prestaria más dindero a mi Padre y tampoco Calle lo haría.

De verdad las cosas pueden marchar bien.

Escuché el sonido de la puerta abrir y supe que había llegado la que ahora sería la dueña de mis quincenas.

Calle: Ya llegue amor /dijo mientras cerraba la puerta

Poche: Amor - dije acercandome a ella - Amor! /grite con emoción y pude ver su confusión

Calle: Qué sucede? /la tomé de los brazos y la acerqué a mi

Poche: Me contrataron! /grite, me miró con asombró y alegría

Calle: Felicidades! Sabía que lo lograrias.

Poche: Tenemos que celebrarlo /afirme

Calle: Y que quieres? /preguntó con picardía

Niñita traviesa.

Poche: No se - alze los hombros con inocencia y dije - Tal vez un vaso de agua.

Calle: Tonta /reí ante su comentario y no dude en acercarme a ella para besar sus labios

Quién diría que mi felicidad estaría contada, pues lo que pasaría en esa entrevista cambiaría todo más adelante.