Pequeña pervertida~ Han y tu.

[1]

T/n solía concentrarse en aquel chico que aparecía en sus sueños cada noche,ella no lo conocía,ni él tampoco a ella.
Luego de algunos minutos de este sueño,olvidaba su rostro,solo recordaba aquella preciosa voz.

—¿T/n?,llevo llamándote hace minutos,¿que te pasa?—pregunto la rubia acomodando su largo cabello.

—Lo siento Lana,sabes muy bien que pienso en el—sonrió y palmeó mi hombro suavemente.

—Pequeña,me dijiste que no reconoces su rostro y que no lo conoces personalmente,bueno,ni sabes si existe.—contesto mirando fijamente mis ojos.

—Lo se,se qué tal vez no exista. Pero veo esto muy real..—saque su mano de mi hombro y me dispuse a tomar mi licuado.

—Está bien T/n,no te enojes,no lo dije de mala manera—asentí y conteste fríamente.
—No hay problema—

—¡Se me hace tarde para ir al trabajo!,esto se me está haciendo muy difícil—río mientras tomaba su bolso y corría hacia la salida.

—¡Que bien!,tendré que pagar todo esto..—susurre casi inaudible pero..

—Hola,¿en que podría
ayudarte?—preguntó el mesero sonriendo de lado a lado.

—No,no en nada.—saque la plata de mi cartera y note que tenia solo para mi licuado.

—¿segura?—preguntó nuevamente con un tono irónico.

—Mi amiga llegaba tarde al trabajo y no me dejo dinero para su
licuado...—negó mientras reía

—Note que salió corriendo,no te preocupes.
Otro día me lo pagas..—note su voz algo parecida a la de mis sueños,debe ser tonto,pero para saber si es el,debo ver su abdomen.

—Nono,podría quedarme a ayudar si así quieren. No tengo
problema..—asintió

—Como quieras,Justo tenemos poco personal. No viene bien
una mano—sacó su uniforme,el cual era una simple bata con el logo y me la entregó

—Te enseñaré qué debes hacer—dijo mientras comenzaba a caminar en dirección contraria a la salida.

—Aquí anotarás las órdenes—me dio una pequeña libreta y una lapicera negra.—Luego de que termines de anotar,dirígete a aquella puerta,entra y entregasela al chef,y eso.—asentí y me puse el Grande uniforme.
Así pasó todo,iba de punta a otra tomando órdenes,era mala con la memoria así que tuve que anotar hasta el número de mesa.

—Buen trabajo chica—un señor calvo de más o menos 45 años palmeó mi hombro.

—Muchas gracias señor—me saque el uniforme y se lo entregue.

—¿No te gustaría trabajar aquí?,trabajarías a la misma hora que hoy hiciste,eres buena tomando pedidos y le caes bien a la
gente..—asentí y sonreí,por dentro sabía que esta era la señal para conocer mejor al chico de voz preciosa.

—Me gustaría mucho—mire al chico y este sonrió.

—Comienzas mañana,para saber la hora y alguna cuidados especial,habla con Yang Jeongin o Han
JiSung—señaló a dos chicos que estaban a mi derecha.

—Muy bien,hasta mañana jefe—tomé mi bolsa y salí del local.
Ya se había hecho de noche,lamentablemente me iré sola,y tengo mucho miedo.
Mientras caminaba muy asustada por la calle,alguien grita mi voz,una voz masculina,pero tierna.
Voltee sonriendo y allí vi a Han y a su amigo Jeongin llamándome.