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Comencé de nuevo otro día, con la cabeza en alto. Mis propósitos tienen un significado mayor ahora.

Ya con esta sería nuestra primera semana peleando día a día, los primeros días fue difícil coordinar la guardia ya que unos dormían y otros cuidaban.

-¿Pudiste dormir bien hoy? -pregunta [t/n] con su bella sonrisa.

-Si tu estabas cuidandome, ¿como no dormir bien? -pregunte y sonreí así que ella se acerco a mi.

-Me gustaría que solo tu sonrisa fuera parte de mis recuerdos y de nadie más -susurro cerca de mi así que pude escucharla con delicadeza.

Así que la abracé antes de que los titanes estuvieran muy activos y antes de que alguien despertará y comenzará a mirarnos raro.

Pasaron las horas y hangi peleaba junto a mis hombres, la verdad era un día pesado. Se nos agotaban las energías y casi no comíamos.

Comenzaba a asustarme, era solo cuestión de tiempo para que comenzaramos a caer.

Y así fue, lo que dije tenía sentido, al menos para mí ya que mis hombres fueron los primeros en sentirlo.

-¿Cuántos perdiste tu? -pregunta hangi y yo respondo con la mirada en alto.

-12 camaradas-mencione y ella habló de sus penas.

-Perdí a 15 en un enfrentamiento con titanes anormales-exclama hangi y comienza a darse por vencida.

-No debes perder la cordura ahora que solo nos hace falta la presencia del titan colosal y el titan acorazado.-mencione y ella recuperó su objetivo del porque mantenerse con vida.

-por ahora no hagamos nada que deje morir a más camaradas-explique y ella comenzó a vengar la muerte de ellos.

Al parecer hangi y yo tenemos un lazo de amistad desde que nos conocimos, eramos los bichos raros con mejor puntuación en la legión de exploración y así nos asignaron con erwin.

UNA MISIÓN MÁS|Levi Ackerman y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora