Capitulo 1: Dormida

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  • Dedicado a Miros Seeu Mejia Saldana
                                    

Era tan suave y tan fría, al contacto de mi piel era muy fácil que se derritiera en mis mejillas, salía un poco de vapor por la temperatura de mi cuerpo, cerré los ojos y di vueltas como una niña pequeña ,el vestido blanco de algodón se movía al compas de mis giros.

Una ráfaga repentina cubrió mi cuerpo, el frio me recorrió todas las células del cuerpo, no quise abrir los ojos pues a pesar del frio sentía una deliciosa sensación en mi cuerpo…en mi alma

-Estoy aquí….-

Aquella voz masculina susurro en mi oreja, su aliento era helado, me di cuenta que aquella ráfaga de frio no era lo que sentía mi cuerpo…era el cuerpo del abrazándome por la espalda, abrí los ojos lentamente, gire con temor de perder ese placer, era el chico de mis sueños desde que era pequeña…alto, pálido, de mirada purpura y de cabello largo negro…pero…esta vez ya no lo veía que me vigilaba, oculto , a la distancia…esta vez lo sentía en mi piel.

-Pronto…-pronuncio con dulzura como si no quisiera que huyera de él, sus ojos purpuras penetraban los míos con intensidad, una sensación de miedo me hundió al ver su colmillos largos y filosos.

…Y entonces desperté…solo que esta vez ya no estaba en mis sueños…el estaba enfrente de mi cama de hospital, donde el único ruido es el goteo del suero , donde colgaba mi pierna derecha fracturada que aun me picaba de comezón por el yeso.

Sangre purpuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora