A pesar de que nuestro destino ya estaba decidido y realmente no hubiera nada que pudiera hacer para pararlo aún me queda nostalgia de lo que pude haber cambiado o más bien, de lo que quisiera haber cambiado.Pero no pudo ser así; esa historia de amor con la que siempre soñé nunca se haría real, al menos no en ese tiempo, en ese tiempo donde arriesgábamos nuestras vidas y nuestro todo para poder combatir con los demonios.
Y en el momento en el que me entere que habías muerto no hice más que rabiar, que entristecerme, que callar... porque sabía que en el momento que yo me volviera débil, a pesar de no estar a mi lado, me odiarías; así que continúe luchando mientras que mis esperanzas me susurraban lo que pudo ser y el cómo debía continuar por ti.
Fui tonto sabes, a pesar de saber que todos los días que me levantaba en las mañanas había la esperanza que al día siguiente no fuera así me aferre a que al menos podría continuar a tu lado, apreciando tu presencia y calidez.
Era raro para mí pensar en los sentimientos de felicidad después de todo lo que había pasado; pensé que entendería que mi felicidad no era duradera, al menos no en este mundo, pero me quise arriesgar a amarte y sentir esa alegría que sabía algún día seria mi amargura.
Y con todos mis melancólicos sentimientos por ti, me prometí que no te dejaría de amar en está ni en cualquiera otra de mis vidas.
Fue entonces que se me dio otra oportunidad, había vuelto a nacer en un mundo donde los demonios ya no existían y mi paz nunca se me fue arrebatada.
Era extraño, a pesar de que era un nuevo comienzo los recuerdos de mi vida pasada seguían intactos al igual que aquella promesa.
Te comencé a buscar; la mayoría de las cosas por aquí eran igual a diferencia que en este mundo no existía el dolor por el cual alguna vez pase y sufrí.
Aún no te encontraba pero la esperanza de hacerlo no moría.
Hasta que por fin lo hice; una vez más me había encontrado con tu persona y con aquellos bellos ojos que se encontraban llenos de brillo ahora.
Me burle de mi mismo. Realmente nada había cambiado, incluso en este mundo había una barrera que nos separaba.
Yo un maestro y tu mi alumna. Pero ahora era diferente, ya no dejaría que esa barrera me alejara, ahora estaba más que decidido y está vez si me quedaría a tu lado.
-Kochou...-pronuncie exaltado y feliz con tu presencia.
Tú me miraste incrédula mientras te quedabas como estatua frente a mí.
-¿T-Tomioka-san?-preguntaste temblorosa mientras cubrías tu boca en señal de gran sorpresa.
-por fin nos volvemos a ver...Shinobu- dije felizmente mientras te regalaba una gran sonrisa extendiendo mis brazos hacía ti.
No lo pensaste dos veces antes de abalanzarte a mis brazos llenando mi pecho con lágrimas. Cerre el abrazo disfrutando completamente de tu calidez y delicioso aroma a lavanda.
No te preocupes ya, porque prometo jamás volverme a separarme de ti...
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¡Mi primera historia de esta hermosa pareja!, no tienen idea de cuanto los amo y de las ganas que tenía de escribir sobre ellos.
Si este one-shot llega a hacerse conocido probablemente publique un libro de one-shots de la pareja, solo si llega a hacerse reconocido :3
No soy muy exigente, con tal de que llegue a más de veinte visitas me pondré manos a la obra :))
Espero que les haya gustado
:3
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Volverte a ver...
FanfictionEl simplemente la extrañaba, la quería a ver de nuevo y poder completar lo que siempre soñó. • • • • • • • • • • Pareja *Giyuushino* One-shot. Estos personajes no son de mi propiedad.