Me levanté, me arregle y salí de mi casa con un poleron negro con capucha, camine unas cuadras y me detuve en seco. Asustada, me escondi, había gente del Gobierno llevándose a unos niños los cuales luchaban por volver donde sus padres.
Tuve que agachar la cabeza y volví a caminar mucho más rápido, esos niños no se veían enfermos, no se los podían llevar, ¿que diablos estaba pasando?
Llegué a mi trabajo y me fui a poner mi uniforme, cuando acabe, agarré los archivos y fui a la habitación que compartían las hermanas y Carlos, toque la puerta y entré cuando recibí respuesta.
Al entrar se me humedecieron los ojos, Carlos tenía un bozal muy apretado y ambas hermanas me miraban con ojos perdidos en su locura, no me gustaba verlos de nuevo de esa forma...
-¿Hola chicos como están...?- pregunte con tristeza.-
- Hermana~ Isadora pequeña es nuestra nueva compañera- Saludé con la mano a Ina que me apuntaba de una forma infantil.-
-Jujuju te ves taaan seria como siempre...-añadió Tina que empezó a girar a mi alrededor con curiosidad.-
-Hola Isa, estamos bien, supongo, osea no, pero muy bien en comparación a los demás...- Carlos trataba con dificultad explicar, se le notaba triste, me senté junto a Ina para hablar un poco y Tina notando la tristeza de su chico se lanzó sobre el como una niña pequeña, haciendole sonreir-.
-Seré su nueva enfermera, a si que quiero saber algunas cosas sobre este lugar, quieres hablar de los demás y de tu estadía aquí?- antes de que el contestará las hermanas de sentaron en el suelo con un juego de Té.
Carlos asintió pero sus ojos demostraron pena y miedo por recordar aquel día donde todo empeoró y calló para nosotros, y todo el mundo.
Las hermanas nos pasaron unas tazas y se sentaron a hablar entre ellas, como era de esperarse no estaban consientes de a su alrededor y Carlos se preparaba para explicar un poco del lugar.
-Bueno e.... no se como empezar, recuerdas cuando todo se volvió oscuro cuando Elena, Joaquín y Lucia enfermaron y se comportaban agresivos?-Asentí con tristeza- Aquel día casi nos matan y al parecer lo siguen queriendo hacer pero no los culpo, tengo miedo, muchas veces se los llevan y vuelven con cicatrices o con los ojos de distintas maneras pero siempre con cara de odio-.
-Hablan de Ele?- pregunto Tina curiosa y asentimos- Ese gato negro es muy solitario ¡deberiamos llevarle galletitas~!.-
-¡Galletas gigantes!- Grito Ina-.
-¡No, ella es un monstruo!- exclamo Carlos y lo mire mal- No me mires así! Nos trató de matar, comprende que para mí es mala!.-
-Te salvó la vida, a ti y a Tina -susurre- mira ya va a ser la hora de cenar a si que vamos, prometan comportarse si?- cambie de tema rápidamente y salí de la habitación.-
Asintieron sin haber escuchado mi susurro y fueron al comedor, cuando entre miré a mi alrededor, habían guardias con pistolas tranquilizantes y escudos, me mantuve cerca de las hermanas que miraron con susto cuando una puerta se abrió, de esta entraron dos chicas y un chico.
Una chica muy familiar para mí, la más baja de los tres tenía cadenas rotas en los brazos, una media sonrisa y ojos heterocromaticos.
La segunda chica algo más alta que la segunda iba al lado del chico, tenía cadenas rotas en los brazos y piernas y una especie de collar de perro junto a unos temibles ojos rojos.
El chico tenía una sonrisa siniestra, las cadenas que por debajo brotaba algo de sangre, al pasar junto a Diego y su grupo empezó a gruñirles agresivamente.
Me acerqué a ellos lentamente y me senté a su lado, muchos pacientes y enfermeras me miraban como si ya estuviese muerta.
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Demencia
RandomUna chica irá a trabajar a un manicomio, en el cual su pasado le dará un gran golpe al ver a sus antiguos amigos en el, presas de sus enfermedades. En un lugar donde las reglas no te aseguran protección, donde no sabes en quien confiar, donde si no...