[Arco 05 – El Caballero Centauro]
Él no sabe cuánto tiempo ha pasado.
Cuando él se dio cuenta de su situación, 'Ernesti Echevarría' se encontró así mismo flotando en la oscuridad.
Ese espacio desierto, la oscuridad parecía extenderse hasta el infinito, su pálida piel blanca y su brillante cabellera plateada, contrastaba fuertemente con el fondo.
Él no podía sentir el piso bajo sus pies, sólo una sensación como si flotara en el agua.
Era extraño, pero él no parecía preocupado o molesto por su situación actual. Él simplemente fijó su atención al otro lado del espacio infinito con la mirada perdida.
Finalmente, algo más aparte de él apareció en este extraño lugar.
Se trataba de una caja rectangular con adornos de colores. Viéndola de cerca, esta tenía una imagen de un 'robot' en una pose genial en ella y el 'logo' mostraba el nombre del robot en uno de los lados. Esta caja venía marcada con una detallada 'descripción' en cuatro de sus lados – indicando que esta caja contenía un 'modelo de plástico'.
Y había más de una.
Todo tipo de cajas se encontraban alineadas juntas, rodeando a Eru. Él estaba familiarizado con todos los robots descritos en las cajas, no había forma de que los olvidara – después de todo, él compro todos estos, justo antes de aquel 'terrible accidente'.
"Aaahhh... así es, estos son los 'aún por ensamblar', ya que es una rara oportunidad, los completaré."
Ignorando el hecho del por qué estaban ahí, él sin preocuparse por cosas tan triviales, sonrió y casualmente, como siempre, tomó las 'cajas de modelos de plástico'.
Con alicatas en mano, el acomodó un mantel para cortar, un cúter, pinzas, lima y pegamento, frente a él.
Este era un hábito que él tenía en el 'pasado', acomodar sus herramientas y las piezas del modelo, ordenadamente antes de ensamblarlo cuidadosamente. Era una especie de ritual y formaba parte de su rutina.
Eru, una vez terminadas las preparaciones, se encontraba de muy buen ánimo, mientras que alcanzaba una de las cajas que flotaba frente a él.
Su intención era abrir la caja, sacar las piezas del modelo y leer las instrucciones.
Este era un momento de felicidad en el que él se sumergía así mismo en su pasatiempo, pero por alguna razón desconocida, la caja se movió inesperadamente y evitó su mano. Él lo intentó varias veces más después de eso, pero al final él no pudo tocar ninguna de las cajas, las cuales parecían alejarse más y más, mientras parecían desaparecer en la oscuridad del abismo.
"¿Hmmm? Por favor esperen, yo 'aún' no he podido ensamblar ninguno, ¡¡Yo quiero seguir ensamblándolos!!"
El trato de alcanzarlas, pero cada vez que estaba por atrapar a una, las cajas se alejaban más.
Ya frustrado, Eru decidió ponerse serio. Las alicatas en su mano, se transformaron en la pistola-báculo 'Winchester'.
Las escrituras de mana se dirigieron a su querido báculo, provocando una manifestación de un fenómeno físico a través de la catálisis del cristal. 'Movimiento Aéreo' – la presión de aire creada por la explosión mágica, impulsó el cuerpo de Eru como una bala, alcanzando velocidades a las que ningún hombre normal podía alcanzar. Aun así, él no podía tocar ninguna caja, como si se burlaran de sus esfuerzos.
"Ni siquiera trates de escapar... ¡No los dejaré escapar! ¡Mis modelos de plástico!"
Sólo un poco más y lo alcanzaré. Eru golpeó las cajas.
