One Shot

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¿Alguna vez, sentiste ese sentimiento tan hermoso que te pone nervioso y a la vez tan feliz? Ese sentimiento causado por una persona, solo una. Quién diría, que aquel bello sentir podría llegar a convertirse en algo tan enfermizo.

Nadie.

Nadie puede adivinar el futuro. Nadie puede saber cómo es realmente una persona por dentro. Que tan manipuladora y ruin puede llegar a ser.

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Era una mañana tranquila en la ciudad de México, en esta ocasión no habría causa ni asuntos pendientes para reunir a todos los países en un solo lugar. Eso alegraba al mexicano, que al fin podría salir y tener un día libre después de meses de trabajo duro.

- Al fin - se dijo así mismo mientras caminaba hacia la oficina del actual presidente de su país.

Tocó la puerta antes de entrar.

- Disculpe AMLO, saldré este día - dijo mientras se asomaba por la puerta que el mismo abrió - así que, si me necesita o surge algún problema, me llama.

- De acuerdo México, no te preocupes y ve con cuidado - dijo aquel señor de mayor edad mientras le dedicaba una sonrisa risueña.

- ¡Genial! Volveré casi al anochecer, suerte con el trabajo - termino para después cerrar con cuidado aquella puerta, escuchando por el otro lado un "adiós" como despedida y sacándole una pequeña sonrisa para después comenzar a caminar a la salida de aquel palacio.

Salió a toda velocidad, le gustaba sentir aquel aire recorrer por toda su cara y hacer mover sus ropas de tal manera que pareciese una película.
Mirar las personas caminar con tranquilidad, otras apuradas, felices y jugando. Eso le alegraba el corazón del mexicano.
Por desgracia, esa felicidad duró poco, pues se tropezó con alguien haciéndolos caer a ambos.

- Puta madre... - maldijo por lo bajo, abrió sus ojos lentamente viendo que estaba encima del pecho de una persona, haciéndolo pararse rápidamente - ¡Lo siento mucho! - sacudió un poco sus ropas con nervios - ¡Fue mi pinche culpa por no fijarme por donde iba!

Sus nervios de pronto cesaron al ver a quién se encontraba en el suelo, con una sonrisa divertida por la actitud del tricolor.

- Bonjour le Mexique [Hola México] - hablo el chico canadiense con una sonrisa mientras se sobaba la parte trasera de su cabeza - hace tiempo no te veía jejeje.

- ¡Canadá! - sonrío alegre - discúlpame carnal, no era mi intención arrollarte jeje - le extiende su mano derecha como señal de apoyo.

- Don't worry Mexico [No te preocupes México] - tomo la mano del tricolor para así levantarse al fin con su ayuda - me dirigía al palacio nacional para verte - dijo ya en pie con una sonrisa inocente.

- Ow~ no tenías porque viajar tanto solo para verme - dijo con un pequeño sonrojo en sus mejillas - ¿Y para que querías verme? ¿Otro problema con la gorda? - arqueo una ceja.

- Jeje no, mi hermano no hizo nada, tan solo quería venir a verte Méx - contestó.

México por un momento se sintió extraño, ¿Había venido a su país solo para verlo? ¿Era en serio? ¿Una potencia como Canadá?

Hagas lo que hagas no recuerdes eso. Tu ya no lo amas.

- Oh jaja - río nervioso - No te hubieses molestado Cana, pudimos habernos visto en la próxima reunión - rasco su nuca para intentar calmarse un poco, no era normal que otros países que no fuesen latinos vinieran a verlo.

Gr! CanMex / OneShot /Donde viven las historias. Descúbrelo ahora