Sí, hoy te vi, y vi la forma de mirar lo que mañana no será mas que un recuerdo de lo que podría ser el ayer. Viste el vago recuedo de lo que hoy parecía el tiempo. Se que me estoy perdiendo, pero no en mis palabras sino en los segundos empleados en descifralas.
Más simple que todo eso: el tiempo se apresta a pasar, da igual su nombre, su origen, su momento o su duración... Al final siempre pasa. Es el rápido camino de las manecillas del reloj lo que marca su apresurado camino. Nada puede frenar la humana ambición de retenerlo. Intentan atrapar con tus manos esos minutos que pasaron, pero no pasaron como los demas ya que dejan una huella. Huella que nadie sacará de la arena contenida en el reloj de la vida.
El recuerdo que el tiempo guarda archivado en sus años, de cientos de días ocultan segundos que bien valdrían una vida. La vida que da el palpitar del tiempo en las entrañas de un corazón imaginado por simples enanos que son el alma de su espíritu... Dejemos descansar la mente.
Descansar, en mi opinión esta es la mejor forma de ver pasar el tiempo. Tiempo vacío, sin rumbo, cansado, meditado, ocultado... No hay rumbo. El tiempo no se diente, no espera a que te pongas en marcha. Y sigue caminando y sin saber su meta avanza.
Y si te digo que te hablo desde otra definición de tiempo en la que: hoy es mañana, ayer es hoy y mañana es ayer.¿Qué dirías? Yo digo que es otra forma de verlo. Una forma imaginativa de ver pasar el tiempo desde la ventana de mi habitación.
ESTÁS LEYENDO
Solamente, hablando a solas.
Teen FictionNo es nada concreto, pero lo es todo ya que en algún momento ha pasado por mi mente. Esta historia, una forma diferente de ver la realidad.