El devorador de sueños II

Una vida complicada

Al correr lejos de la casa de mi ex tía, ya no la considero de mi familia.
Sin darme cuenta y sin ver con claridad aunque aún fuera de día, había mucha niebla tapando el paso, parece ser que no hay nadie, pero en fin seguí corriendo hasta ver 2 luces acercándose a mi,me acerqué un poco hasta sin querer rozar con un carro en movimiento, no me hizo nada,
Gracias a Dios...
Si quisiera morir, no sería por un tonto atropellamiento.
Podría ser por un suicidio después de haber tomado en exceso.
No tengo hogar será mejor volver a ese almacén de cajas.
Recuerdo muy bien hacia dónde debo ir así que seguí hacia adelante, debo olvidar a mi ex familia y concentrarme en mi.
Después de una larga caminanta de al parecer 10 minutos llegue al almacén, estaba vacío así que aproveche en entrar  para luego recostarme en el suelo.
Mi intención no es dormir, no quiero ver denuevo a ese tonto.
-Nunca dormir, ¿entendiste tonto Baku?. .-dije para luego mirar todo mi alredor, supongo que así es nunca estaré lejos de mi pasado, nunca podré volver a confiar en alguien.
Como es que de la niña tan feliz que fui en el pasado, me volví esto...
No entiendo realmente, debí haber echo algo muy horrible para merecer está vida miserable.

-Mamá, ¡me encanta!
-Me alegro que te guste mucho hija. .-
Mi propio perrito, era la cosita más hermosa.
-Nuestra familia es la más agradecida..- dijo mi padre el cual estaba sonriente y nos abrazamos
Recuerdo todo, mi felicidad la cual fue arrebatada y ahora vivo en oscuridad, los prejuicios todo yo no... no puedo escapar de estás ¿cadenas? Habían realmente cadenas oxidadas en mis nudillos , personas burlándose de color oscuro, lo único brillante eran sus ojos y las cadenas, un grito solté.
Ya no estaba en ese espacio, más bien me encontraba en un oscuro lugar, podía escuchar a los búhos.
Decidí caminar aunque las cadenas no me permitían dar pasos largos, divisé un lugar que brillaba, una casa, no más que eso... una cabaña en el bosque.
Esto es extraño.
Camine con dificultad hasta ese lugar, al llegar las cadenas se cayeron y pude abrir la puerta sin dificultad.
-¿Hay alguien aquí? .- pregunte pero no recibí respuesta, más sin embargo escuche unas risas, risas infantiles.
Subí por la frágil escalera y me acerqué hacia dónde se escuchaba ese sonido, abrí un poco una puerta que daba a una habitación.
Vi como una mujer de cabellos verdes, junto a un hombre de cabellos negros estaban en la cama con una niña pequeña, leyéndole un libro.

- Mami y Papi, cuéntenme otro, aún no quiero dormir, ¿Sí?

-Bien. .-respondió la mujer pero el hombre interrumpió.

-Yo lo contaré por ti, había una vez una linda niña al igual que tú, Aunque claro nadie podría ser igual a ti, tú eres nuestra maravilla. En fin, tenía una linda familia, una madre y un padre que la amaban con toda su alma, ella vivía con los amores incondicionales de ellos, haciéndole una infancia y niñez feliz.
Pero en la adolescencia... algo cambio, ya no era la misma, era una persona excepcional y algo extraña, sus padres hacían lo posible para entenderla, pero ella pensó que se involucraban demasiado.
En la escuela le iba mal, la molestaban, era un problema, según sus maestros.
Esa adolescente vivió un climax de sufrimiento, lo único que le podía ayudar era maltratar a su peluche favorito, La culpa es mía, decía ella con mucha ira, un ambiente de tristeza y soledad vivió ella.

-¿Y que hizo papi?

-Escapó, no pudo con todo y se fue lejos alejándose de su familia, la cual realmente estaba triste por su partida, pero ella nunca entendió.

-Esa historia es muy triste cariño, ¿de donde la sacaste?

-Me la acabo de inventar. .- decía calmado dicho hombre, escuche toda la historia...
Mi vida, como es que ese desconocido lo sabía perfectamente...
Me fui de esa habitación

•••

-mire de reojo la puerta para verla irse-
(Mi trabajo pronto estará hecho)
Es hora de que duermas Harmony. .- le dedique un beso en la frente al igual que a mi mujer inexistente.