¿Qué piensas de Rose Wilson como compañera de equipo?
Bueno, la respuesta dependía de a quien le preguntaras.
Lo extraño de esto es que, si le preguntabas a Raven, la mitad demonio solo sonreía de una forma bastante peculiar. Como si detrás de esa preguntara hubiera un chiste personal.
Y tal vez si lo había o solo era la imaginación de Damián.
Él considera que Raveger es... aceptable. Excepto por los constantes comentarios de mal gusto y el doble sentido que la chica manejaba.
Pero ¿Por qué Raven sonreía de esa manera al escuchar el nombre de la hija de Slade?
¿Acaso eran amigas?
Damián odia no saber cosas, es curioso. La sospecha es algo que lo define a la hora de ver algo extraño o fuera de lugar.
¿Por qué su amiga mas cercana actuaba fuera de lo habitual con esa simple pregunta?
Ojalá jamás lo hubiera descubierto.
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- ¡Cuida tu defensa, chica cuervo! Estoy barriendo el piso contigo
-No sé usar esta cosa! Prefiero la magia a tener que blandir un pedazo de metal.
-Lenore sabia manejar muy bien la espada... solo digo...
-Oh, mejor cierra la boca, Rose.
- ¡Solo bromeo, vamos! Inténtalo de nuevo... a menos que prefieras que "Damián-perfección-Wayne" te enseñe...
-Esta bien, sigamos...- Raven hizo una mueca y levanto la espada e intento ponerse en posición de combate, aunque en realidad sentía que estaba haciendo el ridículo, esto no era lo suyo.
Muy a su pesar tenia que aprender algo de defensa personal pues en una misión reciente se había quedado sin energías y casi la matan, sino fuera por que Damián detuvo las balas que se dirigían a ella... ahora estaría en el infierno saludando a su Padre.
La chica albina se ofreció a ayudarla con la espada, se habían vuelto cercanas desde que ella llego al equipo a pesar de sus personalidades diferentes algo en Rose le agradaba.
-Escuche al pelirrojo entrar en tu habitación anoche- Rose comento mientras dirigía un ataque que con suerte Raven esquivo- ¿Noche ocupada?
-Algo así- el truco con Rose Wilson era no darle mucho material a la hora de responder sus preguntas incomodas, aunque a veces eso no la detenía a seguir.
- ¿Tan rápido como llega, termina? - Ravager chasqueo la lengua- Vaya, consecuencias lamentables de la hipervelocidad- continuo con una sonrisa ladina.
-Eres asquerosa- Rachel se rio e intento devolver un golpe con la espada- ¿Acaso me espías por las noches? - pregunto con una ceja alzada mientras seguía riendo.
Otro bloqueo, el metal de ambas espadas choco, las armas se cruzaron y quedaron frente a frente.
-Me gusta esperar a que luego de que el velocista te deje insatisfecha salgas con solo una blusa cubriéndote por una taza de té- Rachel levanto ambas cejas, esa respuesta no se la esperaba- ¿Te estoy incomodando? - Rose le susurro muy cerca de sus labios.
Esto era un juego peligroso, nada nuevo.
Las dos tenían conversaciones que finalmente incluían esta clase de comentarios algo singulares, solo que Rose a veces cruzaba un límite en donde Raven ya no sabia si bromeaba o hablaba en serio.