Adrián

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Esta es la historia del chico al que le gustaba dar abrazos.

Había una vez, un chico al que le gustaba dar abrazos, muuuuuchos abrazos.

Sentía que al darlos compartía con el resto de gente algo único.

Y entonces, conoció a una chica que no se dejaba abrazar.

Ella, era alegre, pero poco cariñosa, veía los abrazos como algo insignificante que solo se daba para demostrar algo.

"Los abrazos son tristes" decía "se dan en ocasiones fúnebres, ¿Porque cuando estamos contentos también?"

Entonces, él le dio un abrazo.

Y nadie sabe que significó ese abrazo para ella,

Solo saben que desde ahora, utiliza excusas tontas para que sus brazos se rodeen y se unan en un solo ser.

Cafè i CartesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora