Es mi lugar. Ese espacio extenso lleno de áreas verdes. Es como mi segundo hogar. Voy cuatro veces a la semana y me encanta poder sentirme parte de esa comunidad. Todos los días hay gente realizando actividades diferentes en determinadas partes del club. Por momentos puede parecer un lugar solitario pero siempre va a haber alguna cara conocida en quien confiar. Es un lugar perfecto para respirar aire fresco, el cual logra renovar una mente abrumada después de un largo día. Al entrar y ver las canchas vacías de hockey por las tardes, el sentimiento de libertad que recorre mi cuerpo es inigualable. Pasan las cinco de la tarde y el club anteriormente vacío se transforma. Chicas de todas las edades entrenando por un mismo sueño llenan las canchas. En esos momentos, este lugar se vuelve lleno de vida y amor por el deporte. En ese instante, sé que pertenezco a él. Es mi lugar en el mundo.
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Tengo que salir
FantasyEra un lugar seguro para mi. No lo entiendo. Todo lo que quiero es que esto sea un simple sueño.