¿Qué es esto que siento?
No estoy por completo feliz...ni triste. No siento nada, me quedo pensando en lo que paso y... siento que algo me falta, un pedazo de mí. Luego me di cuenta que eras tú, aún recuerdo cuando solías ser parte de mi corazón y de mi felicidad, claro, hubo problemas pero los resolvíamos a penas aparecían y de ser así... ¿Por qué nos quedamos aquí? Es como correr kilómetros, no sabes cuál es el final pero aun luchas por seguir corriendo porque sientes que el final es tu mayor deseo, pero de pronto tu corazón deja de latir, sientes ese algo que se le llama decepción, desilusión, cansancio. Das una última oportunidad para seguir corriendo pero llegas al final...y no ves nada, todo aquello que tuviste que pasar y que le pusiste todo tu esfuerzo fue en vano.
Buscas con desesperación una última esperanza para no tener que dejarlo todo, no quieres irte porque buscas algo en donde no hay nada, buscas aquello que pensabas que estaba, aquello por lo que corriste sin parar, sin descansar, sin dudar...
Das la vuelta y caminas sin rumbo alguno, queriendo, por dentro, que aquello que ahora estabas dejando apareciera y te detuviera. Mas sigue sin a ver nada.
Lloras sin consuelo, no quieres que te vean porque los demás al saber por qué corriste tanto y que al final no hubo nada, fue en vano.
Vuelves al lugar que estabas inicialmente, donde comenzó todo y te das cuenta que...nada es para siempre. Todo tiene un inicio y un final.
Pero, eso no acaba allí, tal vez el final fue decepcionante y triste, pero ahora sabrás por quien o porque vale la pena correr, sabrás cuanto deberías correr y hasta donde parar. Eso te hace fuerte, eso te ayuda, eso te hace feliz.
