You Are The Next One

Cap. 3 ¿Recuerdas?

***Ezra***

-Es linda y algo sexy, ¿no lo crees?- hablo Colín volteando a verme.

Su rostro comenzaba a tornarse rojo y su respiración se sintio agitada por unos breves momentos, esos sintomas no creo que sean de algo bueno, se que los he visto en algún lado pero no recuerdo donde.

-Emmm.. pues tiene su toque- respondí con comida en la boca y algo de desinterés.

-Bueno, nadie nunca se ha resistido a los encantos Fauré- dijo eso último con una sonrisa algo perversa.

Si, me dio mala espina, esos síntomas no se ven que tengan nada bueno.

Después de decir aquello que me desconcertó un poco, salió de la cafetería, claro como no me dio buena espina eso, para asegurarme que no fuera hacer nada ni se metiera en problemas lo seguí.

Salí de la cafetería y lo bueno es que lo alcance a ver que dio vuelta en una de las cabañas. El lugar con menos luz del campamento lo se por que la pelirroja me lo dijo. Allí hay lámparas pero están averiadas y ya que nadie va para esos lados, los de mantenimiento no se molestaron en repararlos.

Lo alcance a seguir y cuando mire hacia el frente se ponía más oscuro además, había algunas ramas y hojas tiradas.

A lo lejos pude ver a Colín y lo que parecía ser la chica que salió de la cafetería. Me estaba ocultando para que no se dieran cuenta de mi presencia, y cuando estuve lo suficientemente cerca de ambos pise una rama que hizo un pequeño ruido, lo suficiente para que todos lo hayamos escuchado.

La chica que, creo que se llama Joseline, escuchó el crujido y antes de voltear Colín le tapó la boca sin dejarla hacer ruido alguno.

-Tranquilizate o a ambos nos llamaran la atención- hablo Colín, con un tono áspero a su voz de hace un momento, como la de un loco, su expresión iba cambiando repentinamente de un chico amable a uno con problemas mentales y su respiración se agitaba constantemente .

sabía que algo le pasaba a este chico, fue fácil ver que su aspecto tanto físico como mental cambiaron de una forma muy rara y repentina.

Por suerte para todos pero más para la chica, él la soltó del agarre y ella pudo respirar tranquila.

-Oye ¿qué es lo que te pasa?- hablo la chica con un tono de voz enojada y empujando el pecho del chico fornido.

-Tranquila preciosa solo quiero que pasemos un buen rato juntos- contestó Colín con una voz seductora.

-Te informo que no soy la clase de chicas que estas buscando maldito pervertido- dijo la chica levantando el tono de voz.

Ella lo vio con desprecio y asco antes de marcharse, cuando se dio la vuelta para desaparecer de su vista el la tomo por la cintura y empezó a intentar besar su cuello, a lo que ella forcejeaba.

Fue allí donde decidí salir de mi escondite y pararme frente a ellos dos, acto seguido el chico soltó a la chica, Joseline creo que era su nombre, pero no del agarre.

-Sueltala en este mismo instante- hable de forma pesada para que me obedeciera.

-Y ¿porqué debería hacerle caso a un debilucho como tú?- intentaba hacerme enojar, pero yo viví en un infierno así que no existia personas en la faz de la tierra que me hiciera enfadar, mis sentimientos estaban sellados, yo solo obedecía lo que era bueno y todo lo que yo pudiera corregir lo hacía.

-Si no la sueltas en este instante te golpeare y después de eso te llevaré a la oficina de seguridad para que notifique tus actos y seas expulsado inmediatamente.