"HUELLA"

17 3 0
                                    

20 de Diciembre del 2017

El cielo derramaba sus lágrimas junto a las mías, no lograba alejar mi vista de aquel hueco casi medio vacío, cada uno de tus amigos me daban sus condolencias pero yo no les prestaba atención, mi mente divagaba en todos nuestros recuerdos pasados, el saber que ya no estarás más a mi lado me es imposible de creer.

No me di cuenta del momento en que mi madre llegó a mi lado, tampoco en que me había abrazado tratando de darme un poco de consuelo, ella más que nadie sabe de lo que tú y yo vivimos, fue testigo de nuestro gran amor.

Poco a poco la gente fue dejando el cementerio, algunos en silencio y otros con murmullos, tan solo mi familia y nuestros compañeros continuaron a mi lado hasta que aquella fosa fue tapada en su totalidad, la lluvia no cesaba, aumentaba más sus lágrimas por cada paso que daba hacía ti.

Caí de rodillas aún sin creer que eras tú quien estaba ahí, acaricie aquel tumulto de tierra y tomé un puñado entre mi mano, mi cuerpo empezó a tener pequeñas convulsiones, mis ojos eran inundados por grandes olas de lágrimas, miré al cielo dejando salir aquel grito que no me atrevía a dar delante de las personas, le reclamaba al mismísimo creador de la tierra, el porqué de tu partida. Esta vez fue mi padre quien se acercó y posó su mano en mi hombro apretando un poco, era la primera vez en mis 25 años que logré sentir su tacto.

— Es hora de irnos

Su voz gruesa, la cuál siempre me hacía estremecer, esta vez sonaba un poco mas suave, con ayuda de mi padre me levanté de la tierra humeda, cada paso que daba lejos de ti, era como si me debilatara, porque si, tú eras mis fuerzas. El camino a casa fue eterno, o así lo sentí, las palabras del doctor aquel día, fueron como puñales, en ese instante algo en mi cambió, desde entonces no he dicho ni una palabra, mis lágrimas hablaban por si solas.

No sabía que era más frío, si el exterior con la lluvia o nuestro apartamento con tu ausencia, cada rincón, cada cosa, todo, absolutamente todo me recordaba a ti, no sé como haré de ahora en adelante sin ti. Todas las mañanas te levantabas, preparabas café y me llevabas el desayuno a la cama, luego solo nos abrazabamos por varios minutos antes de empezar nuestras labores.

Nuestro cuarto guarda en su memoria, cada instante en el que me hacías el amor, cada te amo y el juntos por siempre, que me solias decir. Una lágrima bajó por mi mejilla, al ver aquel regalo que me habías dado en nuestro aniversario.

_FLASHBACK_

El tacto de tus manos sobre mis ojos, hacía que mi cuerpo se estremeciera, incluso con tan solo una mirada tuya podía desfallecer.

— No mires cariño, no hagas trampa

— No lo hago. _Una risa nerviosa escapo de mi boca_ En serio

Sentí como hiciste que me sentará en tus piernas, luego bajaste tus manos a mi cintura y tu mentón lo dejaste sobre mi hombro, giré mi rostro y vi tu hermosa mirada sobre la mía con una amplia sonrisa.

— Feliz aniversario cariño

Depositaste un beso corto en mis labios y hiciste un movimiento de cabeza hacía la mesa, miré hacía donde señalaste, una caja mediana y envuelta se encontraba sobre la misma, la tomé y la abrí, inmediatamente una sonrisa se dibujó sobre mi rostro.

— Espero te guste, me fue difícil hacerlo pero valió la pena

— Es hermoso...

No podía articular muchas palabras por la emoción, JongHyun siempre me decía que quería aprender a dibujar y cuando se inscribió a aquella clase, jamás pensé que fuera por esto, había hecho un autoretrato de nosotros dos, del primer día en que nos conocimos, sentí como resbalaban lágrimas por mis mejillas.

— Bummie, no llores, apenas es el primer regalo

Nos levantamos del sillón, no me di cuenta cuando sacó algo más de la caja, pero vi como se arrodillaba con una pequeña caja de terciopelo, al abrirla había un hermoso anillo.

— Kim KiBum, te quieres casar con este sucio y feo perro?

Asenti desenfrenadamente tapando mi boca por la emoción. — Claro que acepto Puppy. Al levantarse lo abracé fuerte, al colocar el anillo en mi dedo, me reí al ver una pequeña HUELLA grabada.

— Te acuerdas lo que dije, cuando me preguntaron, que había sido lo mejor que me había pasado en la vida?

Asenti y lo miré. — Dijiste: "Lo mejor que me ha pasado en la vida, fue haber conocido a Key"

— Eres esa HUELLA, porque marcaste mi vida para siempre.

_FIN DEL FLASHBACK_

Me acerqué aquel mueble y sonreí con nostalgia.

— Tú también marcaste mi vida, Te amo Kim JongHyun, Te amo mi Puppy.



Fue difícil contener mis lágrimas, con cada palabra que escribía, aunque han pasado ya casi dos años, duele, duele como los mil demonios, decían que el tiempo curaba todo, decían, pero realmente lo único que hace es que toleremos un poco el dolor, eso es todo lo que hace.

Espero les haya gustado esta historia corta, quise recrear aquel día tan doloroso, en nuestra bella versión del JongKey ❤

Día 1. 18/05/19

"RETO #1"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora