Capítulo 2

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Más adelante, cuando hubo más confianza le dije que viniera al parque que estaba enfrente de la escuela o sino, mis amigos y yo íbamos a ir a su casa. Le dije que tenía 10 minutos para llegar. Luis vivía a 3 minutos de la escuela.
Era una amenaza de broma pero al parecer si llegó.
Empezamos a jugar con una pelota de plástico, y de repente llegó un compañero que se llama Daniel, él estaba fumando.
- Dame - le dije mientras se nos acercaba - ¿No quieres jugar?
- Ya tiene poco, acá traigo otro - lo sacó y lo prendió. Después me lo dió.
Yo estaba jugando mientras comenzaba a fumar. Era un poco raro porque en una mano tenía el cigarro y con la otra golpeaba la pelota.
Llegaron unos niños y ellos comenzaron a jugar atrapadas, yo no jugué.

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