Los Nervios

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- Sé que esto es un interrogatorio, pero no sé cómo empezar.

Mis manos comenzaron a temblar y mi voz se iba apagando cada vez más como si el aire este pequeño cuarto, en el cual cabían tan solo una mesa y tres sillas, no fuera suficiente, como si unas manos comprimieran cada vez más fuerte mi garganta.

Ya no podía más, debía salir de aquí lo más pronto posible, pero aún debo responder a sus preguntas.

- Primero díganos su nombre completo, su edad, lugar y fecha del incidente.

Aquellos hombres sentados frente a mí; a pesar de ser de confianza, pues así lo dictaba su profesión; dan mucho miedo con su apariencia e inspiran su autoridad en demasía.

- Bueno mi nombre es Ivette Amelie Dómine, tengo 24 años y el día del incidente fue el 23 de junio del 2010 en el bosque cerca a mi casa.

- Bien; ahora queremos que nos cuente todo lo que sucedió, sin omitir ningún detalle, sin omitir ningún dato ya sea nombres, direcciones o acontecimientos por más minúsculos o dolorosos que a usted le puedan parecer.

Lágrimas amenazaban con salir de mis ya cansados ojos; no podía creer lo que me estaban pidiendo, es una completa locura.

- ¡Cómo creen que podré hacer eso, las cosas que vi no fueron más que atrocidades, las cosa que escuche no las puede repetir ni el más trastornado psicópata! ¡Todo estaba mal!

- Entendemos por lo que está pasando, pero no debe alterarse, necesitamos de esa información dado que usted fue la única que logró escapar y por ende la única testigo fiel de todo lo que ocurrió.

Las pequeñas lágrimas que antes se apoderaban de mis ojos siguieron su camino para rodear mis mejillas; solo recordar inconscientemente lo ocurrido hace que me duela el corazón por la impotencia de que no los pude ayudar, ahora debo hacer todo lo posible para poder recordar cada detalle, cada movimiento, cada segundo que pasé en ese infierno para poder terminar con esta pesadilla.

Los investigadores luego de ver mi rostro se retiraron de la sala, eso me da un poco de tiempo para meditar, pensar en todo lo que en un solo día había pasado.

Aún no puedo creer que hayan reabierto el caso, luego de todos estos años en terapia con el psicólogo para olvidar todo lo traumático de mi niñez y un día sin avisar quieren que saque de mi memoria todo aquello que guarde y prácticamente sepulte en algún lado de mi cerebro.

Un hombre con un terno algo formal entró, jaló una de las sillas hasta quedar casi al lado mío y me entregó lo que llevaba en la mano.

- Toma, descuida no le hemos echado nada.

Luego de decir eso soltó una pequeña risa que hizo que sonriera, acepté aquel vaso de contenido extraño y la verdad dudoso. Este sujeto tenía otro tipo de aura, era más agradable y tal vez eso me haga sentir de alguna manera un poco mejor.

- Lamento lo que pasó, mis compañeros pueden ser un poco intimidantes. Soy el oficial Courtois del departamento de investigación, de ahora en adelante me han dado a cargo tu caso que según veo fue hace 14 años. ¿Estoy en lo correcto?

Asentí con la cabeza pues aún seguía algo aturdida por lo que pasó.

- Ahora, sé que puede ser algo doloroso y hasta extraño contarle a un completo desconocido sobre lo que ocurrió, pero necesito de esa valiosa información. No quisiera incomodar más de lo que ya has de estar pero ayúdame a ayudarte, tal vez así encuentres la paz que tanto buscas.

Eso me hizo pensar, por qué estoy en constante angustia, por qué los dolores de cabeza no cesan y por sobre todo por qué no me siento tranquila. Tal vez, solo tal vez necesite paz; tal vez fracase en el intento pero al menos tendré la certeza de que lo intenté.

- Está bien, intentaré buscar esa paz que me hace falta y si no logramos llegar a nada júreme que este caso no lo volverán abrir, que no me buscarán para más pistas. Porque ya no creo que pueda soportar volver a recordar.

- Lo juro, así que me ayudará hasta que ya no haya más que escavar en este caso. ¿Trato?

- Trato

Aun así estaba asustada pero confiaba en él, de alguna manera tengo fe en que lo logrará y con la información que le he de dar por fin todo se acabará.

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Esta es una nueva historia que ya estaba tardando en aparecer, pero al fin llegó. Ojalá les guste mucho y la acepten que se vienen muchos más capítulos

Cuando la muerte acechaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora