¿Mi Peor Enemigo?

7.- Un Beso.

—¡Pero si no tiene solución! ¿Como demonios pensabas arreglarlo?

—Así. — Dijo Zayn y no pude proseguir porque el rápidamente con una mano me cogió de la cintura y me apretó contra el, y con la otra acaricio mi mentón mientras unía sus labios con los mios. Si, me estaba besando. Mi Peor Enemigo me estaba besando.

Al principio quise separarme de él, y trate de empujarlo con mi mano. Pero no pude, extrañamente, empecé a disfrutar ese beso. El movió sus labios en los mios tan intensamente que apenas podía respirar. Y... Decidí seguirle el beso.

Ambos íbamos en el mismo ritmo, el me abrazo por la cintura y yo estire mis manos y la entrelaze en el cuello de Zayn. El me abrazo completamente por la cintura mientras me apretaba contra su cuerpo.

La lluvia intensa hacia que nuestro beso fuera todavía mas especial.

Zayn empezó a acariciar mi rostro con sus dedos. Y yo por mi parte, empecé a masajear su cabello. Ninguno de los sabia exactamente que demonios estaba sucediendo. Hasta que reaccione.

—Demonios... — Susurré separándome de el. — Esto... Nunca debió pasar.

—Pero paso y admite que te gusto. — Dijo Zayn mientras se mordía el labio inferior. Viéndose malditamente sexy.

—Yo... me tengo que ir. Olvida esto, olvida todo, ¡Esto nunca paso! — Dije y fui corriendo a la entrada de mi casa cargando a Louis en mis brazos.

Por suerte sabia donde estaba la llave de repuesto. La cogí y abrí la puerta, sin siquiera mirar a Zayn.

Cargaba a Louis débilmente hasta llevarlo al sofá. Descanse un poco y empezaron a tocar la puerta. No la abrí, de seguro era Zayn.

Recobrando fuerzas, cargue a Louis por la escalera con una fuerza que ni yo sabia que tenía. Al fin llegue a mi cuarto con Louis en brazos

"Mierda, no sabía que pesabas tanto, Louis" Pensaba en el interior de mi cabeza.

Acomode a Louis en la cama de mi habitación, baje rápidamente a la sala y saque el botiquín.

Lo cure y lo deje reposar en mi cama, mientras yo bajaba a la cocina a servirme un poco de agua, estaba exasperada y muy confundida, maldito Zayn, maldito beso, malditos sentimientos.

Y es que no lo podía negar.

Zayn yo teníamos un pasado, un tormentoso pasado, al menos para mi. Y como para empeorar mas esta estúpida situación, estaba mi maldita yo interna que no lo podía superar. Odiaba a esa yo interna que estaba muy escondida dentro de mi y muy pocas veces la dejaba salir, como hoy; cuando me bese con Zayn, me deje llevar por mi yo interna que aun sigue sintiendo algo por Zayn.

Que idiota.

Dios, como me duele la cabeza. Creo que todavía no se me pasa la borrachera de ayer con Eleanor.

Sentí que tocaban la puerta. Salí inmediatamente a abrir, viendo por el rabillo de la puerta para asegurarme que no era Zayn.

—Hola. — Me dijo Eleanor al otro lado de la puerta viéndome como yo a ella.

—¿Que haces aquí? — Dije pareciendo grosera, disculpen, así soy, o bueno, así me obligaron a ser.

Le abrí la puerta y la deje pasar, y ahí estábamos las dos, paradas habiendo un sillón a metros, puto cerebro tan inteligente.

—¿Aquí esta Louis? — Dijo pareciendo algo preocupada. Yo asentí con la cabeza mientras arqueaba una ceja. — ¡Que bien! Tenia miedo que después de esa pelea hubiera quedado en la calle.