Mi padre.

Hey Papá,

Desde que llegaste a mi vida, iluminas te mi camino, lo arreglaste y amoldaste para que yo pudiera ir por el sin tropezar.

Siempre un paso adelante, sonriendome, cuidandome.

Por eso te seguí, porque te seguiría hasta el fin del mundo de ser necesario, para que no vuelvas a sentirte solo.

Para que no vuelvas a tener esa mirada triste al recordar a esa persona que tanto daño te hizo, para seguir tu ejemplo, y recordarte lo grande que eres, recordarte que no estuvo mal amarlo con todas tus fuerzas, y tampoco esta mal que aun lo ames, que  luches por ir con él, por saber que esta bien, esta bien Tony no es algo de lo que debas avergonzarte.

Porque él también fue mi ejemplo, también quise seguir su camino, porque ambos fueron la luz que yo siempre quice alcanzar.

—vamos chico, Tony nos necesita— eso dijo Strange apenas estuve devuelta.

Lo conseguiste Tony, sabía que tu nunca me olvidaras ¡lo sabía!

Porque soy tu hijo, así lo siento, sabía que me atraería de vuelta. Pero realmente quiero pedirte perdón y decirte cuanto siento haberte desobedecido, es ¿no es lo que tu me enseñaste?

Salte al portal y apenas te vi y vi al Capitán, supe que lo conseguriamos, lo haríamos, ganaríamos.

—Señor Stark... — apenas te hable, no pude evitar soltar le lengua, pero no pude decir lo que realmente quería...

Papá... ¡Papá lo hiciste!

Tu me abrazas te, como si fuera la última vez, me protegiste de la guerra que nos rodeaba, en ese simple abrazo lo entendí, yo sentí mi cerebro vibrar y todo mi cuerpo erizarse, como una advertencia que venía a mi, como si mi cuerpo me dijera que algo no andaba bien, mi cuerpo me gritaba que no te soltara, que me aferrara a ti como nunca me aferraria a nada en la vida.

Debí hacerle caso...

¿Porque lo hiciste? Dijiste que yo fui irresponsable, aun recuerdo tu regaño y como me quitaste el traje cuando no medite mis acciones ¿pero tu no pudiste seguir tu propio consejo?

Sentí pánico, entendí los escalofríos de mi cuerpo cuando te vi delante de él, cuando frunciste el ceño y enfrentas te cara a cara al Titan, entendí esa advertencia.

Y luego... Lo hiciste.

—yo soy ironman—

Lo hiciste, nos salvaste.

Papá, me haces tanta falta, no se como dar el siguiente paso, porque siempre estuviste para mi, siempre me guíaste, sin dejarme ver lo duro que podía ser seguir sin ti.

Tenía esperanza de que volvieras, de oírte burlarte de la cara de terror de todos.

—Señor Stark, Señor Stark ganamos— moví tu cuerpo, pero tu no respondias, tu simplemente, te quedaste ahí.

Apreté los dientes, y me lance a abrazarte —lo siento, Tony— llore, llore aferrándome a ti, tal vez si le rogaba a la muerte, te traería de regreso, aún que se que se negaría, lo intentaría sin dudar.

Creí que Steve se quedaría, creí que al menos uno estaría a mi lado, pero no fue así.

Apenas te fuiste, el te siguió, el volvió a ti sin siquiera voltearse a mirar a nadie. Siento ser egoísta Tony, enserio siento haber querido tenerlos a mi lado, perdoname por solo pensar en mi, pero yo no quería perderlos.

—hola,chico — Steve me sonrió, y posó su mano en mi hombro, con una mirada tan cálida que yo... No puedo verla.

El mueve un poco sus canosos cabellos y entrecierra sus ojos, causando más arrugas alrededor de sus ojos, intentando decifrarme, justo como hacías tu.

—solo dime que vivieron bien— bajé la vista y espere a que no notará mi tristeza, pero como siempre, nunca fui bueno ocultando las lágrimas.

—vivimos lo que nos falto vivir, como personas normales, la vida que Tony siempre dijo que debía vivir—

—¿él fue feliz? —

—Tu papá y yo fuimos muy felices, ahora solo debo alcanzarlo, y estaremos bien—

—Juntos...

—Juntos— afirmó Steve sonriendo como un tonto, y yo solo pude mirar el anillo dorado en su dedo.

Tony, lo entiendo, entiendo porque me dejaste, entiendo que creyeras que lo mejor era que tu te marcharás, pero entiende me también.

No puedo ser fuerte, no puedo seguir caminando sin tu apoyo, no puedo evitar recordar que ahora no te tengo conmigo.

Pero debo volver a la realidad.

—Ahora estás solo, chico— Happy apretó sus labios y enseguida me pidió irme.

Ya no te tengo, ya no estas conmigo. Por favor perdoname por sentir rabia, por favor perdoname por querer culpar te.

Perdone Tony, perdoname si no hago las cosas bien, perdoname si te desepciono, pero te juro, yo te juro, que seré él mejor, honrare tu memoria como tu aprendiz, como tu hijo, seré lo que tu me pediste que sea.

Sere mejor.