Feliz navidad les deseo al cielo

Parte única.

—Peter

Susurro alguien mi nombre mientras sentía unas pequeñas caricias en mi cabello, me removí un poco en la cama gustoso. No quería despertar.

—Peter, cariño, despierta ¡Es navidad! -Pude sentir esta vez la voz más clara y la asocié a Tía Nat, así que como pude me estiré para luego abrir mis ojos, tallarlos un poco y enfocar mi vista mirando su rostro que tenía una pequeña sonrisa-

-Buenos días, tía Nat.

-Buenos dias, querido, levántate que estamos todos esperándote abajo para que podamos desayunar y abrir los regalos.

Tía Nat dejó un beso en mi cabeza mientras sonreía, desde que Mary había fallecido ella había tomado el puesto como mamá, tía y amiga. Sabía que nunca superaría a Mary pero tía Nat lo estaba haciendo de maravillas.

-Vaya...ya es otra navidad sin ti, Mary...

Suspiré pero no dejaría que aquello me afectará, sabía que a mis padres, tío Ben y tía Mary no le hubiese gustado verme triste menos en esta fecha, así que me saqué las sábanas de encima para saltar de la cama y dirigirme al baño a alistarme.

-¡Buenos días! -salude mientras entraba a la estancia, Wanda estaba sirviendo el chocolate mientras los demás vengadores se acomodaban en la mesa.

-Hey chico araña -Dijo Clint robándole una galleta a Nat- hasta que al fin despiertas, pensé por un momento que habías caído en coma.

-De hecho cayó en coma -Dijo Sam con una sonrisa divertida- pero del sueño, apuesto que Nat estuvo 20 minutos intentando levantarlo.

-No te atrevas hablar, Sam Wilson -Dijo Scott quien se sentó al lado de Rodhey- que te tuve que tirar de la cama para que despertarás.

Risas se escucharon en aquel lugar llenandolo de alegría, todos se sentaron pero faltaban dos lugares por ocupar, miré a Wanda y ella solo agachó la cabeza para luego levantarla y dedicarme una sonrisa, iba a preguntar por ellos cuando se escuchó el sonido del ascensor y dos personas salían peleando o mejor dicho así eran sus conversaciones comunes.

—Tony, ya te dije que no le pondrás luces a mi escudo ya es bastante llamativo mi uniforme con los colores de la bandera

—Pero Cap, piensa, si le coloco luces ahora ¡Brillarás más! ¿Cómo deberían llamarte? ¿Capitán escudos locos? ¿Capitán lucesitas?

Se escuchó la risa de quién era mi mentor y un bufido de quién era mi "jefe". Eso hasta que el capitán tomó de las cintura al Señor Stark y lo besaba de sorpresa, todos comenzamos a lanzar silbidos, Bucky, el mejor amigo del Cap les gritó que por favor consiguieran una pieza para que no nos traumaran a Wanda y a mi.
Con eso el Capitán no pude aguantar y se separó del castaño.

-¿Que rayos, Cap?

-No te quejes Tony, había un muérdago -Dijo con simpleza el mayor señalando el muérdago encima de sus cabezas- y no, no le colocarás luces a mi escudo. ¡Hey Buck! ¿No despertaste de malas?

El señor Stark se quedó parado allí con una sonrisa que yo llamaría de idiota, quizá era la misma sonrisa que colocaba cuando veía a MJ.

-Hey, Tiny Tony ¿Acaso te robo la lengua el ratón Rogers? -dijo Clint con una sonrisa burlona en su rostro mientras el señor Stark bufaba y se acercaba a la mesa. En la cabecera se sentó el Cap y al lado derecho frente a mi, mi mentor que al verme sonrió con alegría.

-Hey mocoso, ya despertaste ¡Milagro de navidad! -El Cap solo rió mientras que el que regañaba a mi mentor fue la señorita Potts, Happy me miraba con burla y yo solo pude sacarle la lengua en modo de respuesta.-