Ryoga vivía con akane en el dojo tendo eran recién casados así que aún tenía mucho por compartir con akane, aún no tenían hijos ryoga era cariñoso y amoroso con akane y ella lo disfrutaba así pasaron varios años hasta que ella comenzaba a cambiar y a ryoga no le gustaba esa forma.
Akane se miraba diferente y su cuerpo también a pesar de que varias veces se entregaba a ryoga ya no lo satisfacia.
RYOGA: akane iré a entrenar no me esperes.
AKANE: ryoga todos los días sales a entrenar y llegas muy tarde hace mucho que no me tocas.
Ella lo decía con preocupación por que era cierto ryoga ya ni siquiera la besaba.
Ryoga se fue ignorando a akane ella se recosto llorando por que pensaba que él ya no la amaba, ella se quedó dormida sola como siempre porque ya no lo esperaba como al principio, al despertar vio a ryoga dormido ella se levantó sin besarlo; más tarde los dos se encontraban desayunando cuando akane habló con ryoga.
AKANE: me voy por una semana con mi padre ya que últimamente no se ha sentido bien.
RYOGA: haz lo que quieras.
AKANE: adiós ryoga.
A ryoga siempre se le veia de mal humor pero a pesar de eso no dejaba de amar a akane él deseaba tenerla de nuevo pero para él la pasión se le había terminado, en cambio akane seguía siendo la misma mujer dulce y docil que era cuando se casó.
Como cada noche ryoga se iba a entrenar y eso a akane ya no le preocupaba ella alistaba todo para irse con su padre, pero antes de dormir le habló a shampoo.
SHAMPOO: bueno.
AKANE: como estas.
SHAMPOO: bien gracias te oyes un poco preocuapda.
AKANE: no es nada shampoo solo te quería platicar que mañana me iré con mi padre por una semana se siente un poco mal he iré a cuidarlo.
SHAMPOO: lo siento espero que se mejore y ryoga ira contigo.
AKANE: ni siquiera le dio importancia shampoo te dejó.
SHAMPOO: esta bien te deseo un buen viaje.
AKANE: gracias.
Esa pequeña conversación se quedó en la memoria de shampoo para akane ella era su única compañera ella se sentía tranquila ante toda la situación.
Al día siguiente shampoo se alistaba ella saldría se puso más bella que nunca akane se había ido a la casa de su padre sin despedirse de ryoga, él sabía que akane se había ido y comenzó a extrañarla en ese momento alguien tocaba la puerta y en eso él la abrió.
RYOGA: tu que haces aquí estoy solo.
SHAMPOO: si me dijo akane anoche.
RYOGA: te habló que noble de su parte.
SHAMPOO: si es muy considerada conmigo.
RYOGA: quédate siento una fuerte necesidad.
SHAMPOO: para eso estoy aquí.
Shampoo lucía un vestido tradicional de un color que hacia que su belleza resaltará más, ryoga tenía unos brazos capaz de conquistar a cualquier mujer.
#doremi
