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Love me harder.          

When I get you moaning you know it's real.       Can you feel the pressure between your hips?       I'll make it feel like the first time.    

    El camino en el auto fue totalmente silencioso, él la miraba de reojo, pero la joven inhumana seguía con la cabeza pegada al cristal observando las luces de la nocturna Roma. La muchacha no quería pensar en nada más, tarareaba la canción que sonaba en la radio y suspiraba de vez en cuando. Sabía que existía una tensión entre ambos, pero ella seguía sin asimilar lo que sucedía. En aquella misión pasó algo extraño y no solo eso, aquel abrazo terminó por ponerle los sentimientos a flor de piel. El perfume de aquel hombre tan único y le descontrolaba; ella era un completo desastre. Él capturaba su atención por completo.

    Probablemente estaba tan distraída que siquiera se percató del momento en que el auto se estacionó en el subterráneo y él le ayudó a subir al departamento, una casa de seguridad dispuesta para ambos. Campbell sabía la clave de entrada, donde estaba ubicado todo, así que no fue un problema para él ingresar con la joven herida casi en brazos. Él sacó sus propios zapatos y acto seguido la cargó hasta la habitación.

     Era difícil no emitir ninguna palabra, pero no quería hacerlo o rompería en llanto. Simplemente se dejó hacer, él la sentó y limpió los pies sucios al haber estado descalza en la calle, acarició su mejilla con los nudillos y la mujer ladeó el rostro buscando un poco más de ese dulce tacto. Después de aquello, él le volvió a cargar y la llevó hasta su cama; menudo problema.

     Lincoln se aclaró la garganta, la acomodó sobre la superficie acolchada y le dio una última mirada. La distancia entre los dos era reducida y ella envolvió con sus brazos el cuello del muchacho para que no existiera escapatoria. ¿Qué hacía en primer lugar? Pudo percibir como él vió las puertas de su alma y el corazón se le aceleró de tal forma que fue liberado en un suspiro.— No te vayas...

     Murmuró la más baja a aquel hombre que la atrapó desde el primer instante. Anhelaba tener las cosas claras, pero en esos momentos, siquiera le importó. Verla tan frágil por primera vez, solo el hecho de tenerla así sin tener que imaginarle o mantener esa tortuosa línea, jugó en su contra; no le importó tirar todo por la borda. — No tenía ganas de ir a ningún lado.

    Esas palabras bastaron para que sus bocas se encontraran en un fogoso y pasional beso. Fue Francesca quien tiró de sus cabellos sutilmente, ladeó el rostro permitiéndole entrar a su cavidad bucal y le dio total acceso a mezclar sus sabores en una danza tan necesitada. Todos aquellas emociones escondidas las tenía desbordándose cuando éste la sostuvo del muslo, deslizando la diestra por debajo de su vestido hasta sus caderas. Ella se aferró a él como si su vida dependiera de ello; y es que, cada caricia activaba una nueva sensación y hacia estremecer su piel.

    No había forma de retroceder cuando las ropas fueron cayendo al piso de la habitación, la inhumana pasó el saco del traje por los hombros del mayor, desabotonó su camisa haciendo exactamente lo mismo con la prenda anterior. Rompió la unión de sus bocas solo para detallar el perfecto abdomen de Lincoln, descubrió que éste tenía un tatuaje en su pecho y le fue imposible no acercarse a unir sus labios con la piel bronceada del muchacho; le escuchó suspirar y ella tembló bajo su cuerpo.

     Cedió el control, de un momento a otro su vestido fue arrebatado por el ajeno, era él quien la manejaba a su antojo al descender por su cuerpo entre caricias, succiones y besos. Jugaba peligrosamente con el brasier, apretaba sus pechos y se deshacía del encaje para ser su boca la encargada de sumergirla por completo en el mismo placer. Le estaba volviendo loca, iba reaccionando de forma rápida e inesperada, la fogosidad del momento era lo que le hacia fantasear con tenerle de lleno.

    La joven italiana se perdió en el hombre que jugaba con su cuerpo como le diera la gana, era él quien separaba las piernas de aquella mujer y mordisqueaba el borde de sus finas bragas, tirando de ellas hasta desnudarla. Encontrándola húmeda y dispuesta a todo lo que vendría después. El primer gemido no se hizo esperar, tiró de las sábanas y arqueó la espalda ante una lengua traviesa que probaba llevarla al limite, dos dedos se hundieron en ella sin hacerse esperar. Él gozaba, ella pedía más, ¿Qué tan lejos podrían llegar?

    Perdió cordura, sus caderas se movían al ritmo que él le indicaba, alcanzó el cielo cuando éste supo dónde y cómo tocar para hacerle olvidar todo a su alrededor. Estaba tan necesitada y no era la única. Aquel suceso estaba ocurriendo demasiado rápido, los pantalones del mayor se unieron a las demás prendas, él le jaló por los tobillos e hizo que le rodeara la cintura. Su hombría se deslizó contra su sexo sin llegar a penetrar, quiso desesperarla un poco más antes de fundirse como uno.

     Ella se aferró a su espalda, clavaba las uñas y lo recibía gustosa. Tantas veces que anheló a su amante, no se podía comparar con nada. Lincoln era maravilloso, el estruendo de sus cuerpos chocar, el roce constante piel con piel y esa característica forma de hacerla suya, era lo que provocaba que fuese escandalosa y deleitara su canal auditivo con la voz ronca de ahora, su hombre.

     Aquel hombre hizo que ésta le diera la espalda, con el trasero elevado y la diestra tirando de su cabellera larga ya alborotada a causa de lo que sucedía. El rostro hundido en la almohada, ambos siendo uno solo. ¿Quién diría que la noche terminaría así? Ardía de deseo, estaba impaciente por sentir más y probar más del mayor. Él manejaba la situación, le sometía como mejor le pareciera y ella dejaba que éste le guiase.

    Lincoln le desquiciaba, era él quien mandaba y ella no se atrevía a decir lo contrario Era un momento que no quería olvidar jamás. El tiempo se detuvo en ese instante en que cada músculo de su cuerpo se contrajo como nunca antes, necesitaba buscar el aire que no recibía, él marcó su hombro con un casto beso cuando supo que la chica estaba lista para dejarse ir. Le abrazó, le abrazó como nunca antes, haciéndole sentir segura, indicándole que estaba en el lugar correcto con el hombre correcto.

    Aquella noche se consumieron como un solo cuerpo y una sola alma; ella no fue la única en llegar a tan ansiado orgasmo, arrastró a su compañero al notar como éste se desbordó en su interior. No quiso pensar en lo que sucedería después, estaba claro que él no la dejaría descansar por la forma en que apretó sus caderas; lo amaba.


Milagro!! He actualizado durante tres días seguidos, y este one shot en especial va dedicado a una chica que siempre anda comentando, y es por ello que le quise dejar dicha sorpresita

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Milagro!! He actualizado durante tres días seguidos, y este one shot en especial va dedicado a una chica que siempre anda comentando, y es por ello que le quise dejar dicha sorpresita.

@VoidBennet Este es especialmente para ti!! Con amor, Francisca Malavé XOXO<3

@VoidBennet Este es especialmente para ti!! Con amor, Francisca Malavé XOXO<3

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AGENTS OF SHIELD: ONE SHOTS TRADUCCIONESWhere stories live. Discover now