Bitácora de Mu: ¿Los ojos son las ventanas del alma o de nuestros sentimientos?

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-Había amanecido en el santuario, el sol iluminada esplendoroso cada rincón del templo incluyendo mi habitación, golpeaba mis aún cerrados ojos provocando un ligero ardor debido a que recién comenzaba a despertar y costaría acostumbrar mis pupilas a la fuerte luz, talle mis manos en mis ojos mientras emitía un bostezo de cansancio hasta nuevamente caer recostado entre las blancas y sedosas sábanas las cuales cubrían completamente mi desnudez, mi pecho estaba desprotegido y solamente desde la cintura hacía abajo aquella sedosa tela me cobijaba. abría sutilmente mis ojos observando el tejado de la habitación perdido en un sinfín de pensamientos que antes fueron desconocidos para mí debido a que mi infancia y adolescencia fue estrictamente dedicada a entrenar, a crear armaduras, a aprender mas sobre mi fuerza y dotes por la única figura paterna que conocía, mi difunto padre y maestro: Shion de Aries, gracias a él crecí en un hogar, me ayudo y cuido cómo también me hizo conocer a la persona dueña completamente de mis pensamientos más íntimos este ultimo tiempo: Shaka de Virgo, desde que despertaba hasta que dormía no podía apartar su rostro de mi mente, mi corazón se aceleraba con solo acercarme o rozar su mano con la mía al saludarlo o en alguna batalla, mis palabras eran casi expresadas en un tartamudeo ante el nerviosismo en donde era envuelto, no sacaba de mi mente sus ojos, su cabello, sus labios, rostro y cuerpo, aquellas manos que solo alcanzaba a rozar incluyendo cuando le entregue su rosario, desde la primera vez que nos vimos sentí una fuerte conexión pero era desconocida para mi siendo un niño apenas pero a medida que el tiempo avanzaba esa conexión se hizo mas fuerte tanto que me era imposible mirarle a los ojos sin evitar ruborizarme o de sentir cómo mi corazón latía desbocado contra mi pecho causando que debiera sentarme mientras hacía lo posible por aminorar tal agitación. 

Mientras salía ya de la cama observe por la ventana la lejana casa donde Shaka posiblemente se encontraría meditando, incluso hasta aquel rostro sereno y concentrado era dueño de muchas noches de desvelo, todo esto era tan desconocido para mi y no tenía a quien poder consultarle si esto que sentía era normal, tenía miedo de las reacciones de mis amigos ante mis consultas incluso si fuera donde la mismisima Athena para entender porque mi corazón parecía querer salir corriendo llevando mi cuerpo a los brazos de Shaka, era tan extraño y sin embargo me hacía feliz tener en mi interior aquellos sentimientos ¿que hacer? no tenía una figura paternal a quien expresarle mis dudas ni una figura maternal a quien poder escuchar sus consejos ante si la figura paternal no era de ayuda. sabia perfectamente que no podría ocultar mucho tiempo mas estos sentimientos antes de que explotaran y sentía temor de que fuese en un momento importante cómo una batalla, mi cabeza daba vueltas, lleve mis manos a mi frente mientras calme mi acelerada respiración y opte por ir a ducharme, rebusque entre un cajón mi ropa habitual de entrenamiento dejandola sobre la cama para luego llevar mi cuerpo desnudo bajo el agua caliente la cual recorría mi cuerpo cómo mi cabello, tome el jabón entre mis manos llevándolo al agua para que la espuma apareciera y frotar la misma por cada rincón de mi piel ya sea cuello, pecho, abdomen, brazos, espalda y piernas, dedique un buen rato a tallar toda parte de mi cuerpo intentando inultimente de concentrarme al menos en ello pero era un fiasco, nuevamente sus ojos volvían a mi mente mezclados con pensamientos inclusive íntimos y cada parte de mi cuerpo estallo en un calor que nada tenía que ver con el clima o la temperatura del agua, mi respiración se tornó completamente acelerada, estaba ruborizado, mi cuerpo latía y el calor se introducía en mis venas mientras mis ojos comenzaban a cerrarse y opte por lavar mi largo cabello para después salir de la ducha cubriendo mi cintura con una toalla hasta llegar a la cama donde me senté a relajarme y pensar con serenidad-

Mu x Shaka: Un amor EternoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora